El GCE Villaralbo ha vuelto a los puestos de play-off tras imponerse 3-0 al Almazán, con goles de mato, Bruju y Tejedor, y aprovecharse del pinchazo de La Bañeza en casa del Bembibre.

El fuerte viento fue desde el principio protagonista en un encuentro que comenzó intenso y con una plantilla soriana que a punto estuvo de sorprender de la mano de Adrián y Fran aunque la contestación llegó rápido con Garban que tuvo el gol en una buena jugada que acabó en las manos de Andreas.

Ambos planteles habían dejado claras sus intenciones y es que, aunque eran los locales los que llevaron la iniciativa, a pesar del viento en contra, los visitantes no estaban dispuestos a regalar nada, como dejaron claro desde el primer minuto y después multiplicándose en defensa.

El cuadro de Tornadijo podía pagar el exceso de precipitación a la hora de finalizar las jugadas de ataque aunque bien es cierto que enfrente tampoco estaban demasiado finos y el encuentro se convirtió en un intercambio de golpes pero sí es cierto que eran los del GCE los que llegaban con mayor claridad a las inmediaciones de área rival a pesar de que el fuerte aire impedía un juego fluido.

El Almazán invertía la mayor parte de sus energías en defensa sin renunciar a la sorpresa en una buena contra o aprovechando errores de los zamoranos en una primera parte más física y de trabajo que de espectáculo y es que la tarde desapacible también influyó en el fútbol ofrecido. En la recta final el asedio eléctrico continuó aunque sin disparos entre los palos, mérito del trabajo que estaban realizando los sorianos, y también de la mala fortuna porque Garban tuvo la primera diana pero no acertó a empalmar un magnífico pase de la muerte de Bruju desde la derecha.

Con la misma intensidad local que acabó el primero arrancó el segundo acto, aunque en esta ocasión la suerte cambió y tras diez minutos de llegadas continuas, Mato, tras un rechace, puso al Villaralbo por delante.

Lo más difícil, a tenor de cómo habían transcurrido los primeros 55 minutos, parecía hecho y es que el Almazán había mostrado mucho en defensa pero poco en la ofensiva aunque no por ello dejó de buscar el empate tratando de aprovechar los pocos espacios que dejaban los azulones que no estaban dispuestos a que estos importantes puntos sele escaparan.

Sin embargo el encuentro ya era totalmente villaralbino y el recital de los locales continuó para que Bruju ampliara distancias (2-0) y poco después tuviera el tercero que se estrelló contra el larguero. Del equilibrio inicial se había pasado a un absoluto dominio de los de Tornadijo que quisieron matar el encuentro por la vía rápida aunque los sorianos tuvieron ocasión de recortar distancias.

La intensidad fue rebajándose a medida que pasaban los minutos pero hubo tiempo para la reivindicación del zamorano Tejedor, que anotó el tercero de la tarde y que supuso el definitivo 3-0 con el que se regresa al cuarto puesto a falta de cinco partidos.