Tras el encuentro Balta dejó claro que "sabíamos que el partido iba a ser difícil por la forma que ellos tienen de jugar, pero se ha visto condicionado por dos acciones. La primera el gol que nos han metido en un error nuestro, y que ha sido muy rápido, y después la expulsión, cuando nos hemos quedado con diez. Te meten el primer gol a los seis minutos y te hace jugar más acelerado", indicó el entrenador quien, no obstante, subrayó que "en líneas generales, en la segunda parte, hasta el minuto treinta hemos jugado en su campo, hemos tenido el balón y sabíamos que ellos estaban esperando un robo para contragolpear, y luego, con uno menos nosotros, hemos arriesgado con gente arriba para tratar de meter algún gol". "Yo creo que el partido, mientras ha estado bien, ha estado disputado y no tengo nada que reprochar a mis jugadores, lo que sí ha faltado, cuando hemos dominado, es buscar una jugada que nos diera posibilidad de gol porque no hemos tenido ninguna ocasión clara de hacer gol; un par de centros, un tiro? pero no hemos conseguido sacar una jugada limpia, aunque sí hay que reconocer que ellos defienden muy bien y han estado bien, es un equipo bueno", apostilló.

El míster de los zamoranos comentó en sala de prensa que el único "pero" que le pone a su equipo es "que se hayan puesto ellos por delante tan rápido porque estaba hablado cómo nos podían hacer año, pero es mérito de ellos", aseguró al tiempo que subrayaba que "la primera parte ha sido igualada, sin entrar a dominar el partido, pero en la segunda, hasta la expulsión, estábamos dominando el terreno y el balón".

Además, respecto al golaverage perdido, sí admitió que hasta el último momento estuvieron buscando ese gol pero "es un partido más que se ha perdido. Es doloroso porque no queríamos perder, evidentemente, pero es un partido más y dentro de las 38 jornadas, uno que puedes perder".

Ahora ya piensan en el próximo compromiso ante Bembibre "en el que tenemos que competir lo mejor posible e ir a por la victoria. Desde mi punto de vista, tranquilidad", concluyó el míster que huye de cualquier concepto de crisis.