El sueño de los galgueros zamoranos de esta temporada personificado en Saeta de Maestro finalizó ayer con la eliminación de la perra del club Viriato que caía por 2-0 ante la salmantina Chalana de Mocejón. Un año más, Zamora contó con un representante en la final de un Campeonato de España y tras la victoria final el pasado año de Lagartija de la Maluca, del Club Nápoli, esta vez era otra magnífica hembra, propiedad de uno de los galgueros más laureados de España como es Carlos Galache.

Saeta cayó fruto de sus despistes en las salidas que tan caro le han costado en este Nacional. El primero le hizo perder un punto en octavos de final ante Azahar, y el segundo, un espectacular choque contra un poste del tendido eléctrico, a punto estuvo de costarle la eliminación aunque logró recuperarse milagrosamente y pasar la primera eliminatoria del Nacional.

Ayer, Saeta se presentó en el corredero de la Cuesta de los Picos con una importante magulladura del "tortazo" del domingo pasado y, lo que era peor, una contractura en una pata delantera que le trató Oscar Hernández, el preparador de Tordesillas y todavía presidente de la Federación de Castilla y León, que se encarga de cuidar a varias de las participantes. Afortunadamente, sus lesiones no parecieron influir en las dos liebres que tuvo que correr ayer la perra de Carlos Galache.

Pero en la primera llegaba otro imperdonable despiste que casi le hace desengalgar en los segundos iniciales de su primera liebre, una liebre que fue muy corta y, tras perder varios metros de ventaja respecto a Chalana, ya no le permitió recuperarse para perder en 1´20´´. Saeta no corrió mal, pero pagaba muy caro de nuevo su pésima arrancada.

No ocurrió lo mismo ya en torno a las 16.00 horas cuando en un campo de alfalfa que produjo hasta diez liebres, salía la que le correspondía a la perra zamorana. Esta vez Saeta del Maestro sí tuvo un buen arranque, bajó la cabeza y comenzó a correr con la mirada fija en la rabona. Dominó con claridad la primera mitad de la carrera sobre el embarrado terreno de los campos de Nava del Rey, pero Chalana se recuperó y lograba pasarle a mitad del recorrido. La perra salmantina de Astudillo pasó a encabezar la persecución a continuación, pero en un quiebro de la liebre, Saeta recuperó la iniciativa hasta que la rabona se fue al perdedero junto al público (1´29´´).

Fue una carrera muy difícil de juzgar pero los jueces levantaron de forma unánime los tres pañuelos blancos que le daban el punto definitivo a la perra salmantina. La unanimidad de los cargos, sin embargo, chocó con la interpretación de parte del público que pitó su decisión. Carlos Galache asumió con total deportividad la eliminación de su perra más codiciosa como él mismo la calificó en este periódico: "La primera liebre salió hacia unos árboles y la perra se despistó. Comenzó la otra por delante y fue casi un calco de la primera de octavos de final. En la segunda, Saeta salió por delante, ha abierto hueco y hubo una parte que no la hemos podido ver. Apareció la otra perra por delante, supongo que alcanzaría, y luego, al llegar arriba de la loma, iba otra vez primero la nuestra. Me imagino que habrá ganado bien. Felicitar al contrario y hasta el año que viene". Respecto a las protestas del público, Galache añadió que "supongo que desde allí lo verían bien, no lo sé, pero también a veces, la pasión y la afición de la tierra tira mucho. Pero bueno, se felicita al contrario y que al año que viene, si Dios quiere, se pueda hacer un papel igual o mejor, si es posible", concluyó el veterano criador de Guarrate que cumplía su sexta comparecencia en una final del Nacional.

Saeta de Maestro completa así un brillante Campeonato de España que inició en la fase previa de Castilla y León eliminando a San Isidro Labrador, Ciruelos, El Rocío, Baltuana y La Castellana con un solo punto perdido. Ya en la final de Nava del Rey, se impuso a Azahar de El Casar de Escalona del club El Gamonal, de Huelva.

No fue esta tercera collera la única que se saldó con un 2-0 porque también la pacense Lebrijana dio buena cuenta de la segoviana Giona de la Romera en una primera liebre nula de 28´´ y dos válidas de 1´25´´ y 2´40´´ en una magnífica exhibición de perros y liebre. Más igualado resultó el duelo entre Favorita de El Maestro y Tovala de San Blas en una primera liebre de 50´´, una segunda muy difícil de juzgar de 2´15´´, y la definitiva para la perra toledana en 1´17´´. Por último, la toledana Sana de Elviro y la vallisoletana Ona de Calzada están empatadas a un punto (1´46´´ y 1´28´´) y hoy correrán el definitivo.

La jornada de cuartos de final, disputada en la parte occidental del corredero deparó de nuevo unas magníficas liebres que hicieron las delicias del numeroso público aunque la cercanía del perdedero hizo que las carreras no fueran tan largas como en octavos de final.