El CD Villaralbo encajó ayer una victoria forjada en la segunda parte de un partido muy igualado frente a un CD Palencia que impuso su ley atacante en la segunda parte hasta conseguir el solitario gol de la victoria en el minuto 81. Los dos equipos disputaron una primera parte muy floja en la que ninguno de los dos hizo méritos para desquilibrar el marcador, sin embargo, tras el descanso, los de Santi Sedano cambiaron por completo y sacaron mucho rendimiento al juego al contragolpe que terminó trayendo el único gol del partido que sería definitivo.

Diego Rojas, entrenador del GCE Villaralbo, dejó en el banquillo de salida a dos de sus hombres con mayor poder atacante como son Javi Ballesteros y Mato, y pareció notarlo en la primera parte el equipo que prácticamente no protagonizó llegadas, aunque cuando en la segunda mitad, los dos atacantes ya esatban en el campo tampoco, el GCE creó mucho más peligro.

Ambos rivales se mostraron mucho respeto durante la primera parte y ninguno de los dos arriesgó lo más mínimo aunque Durántez pudo haber marcado ya en el minuto 14 en un disparo desde el punto de penalti que se encontró con un defensa y el balón salió ligeramente desviado. También tuvo su opción el mismo delantero palentino en el minuto 27 en una clara ocasión en un remate de cabeza a bocajarro que sacó de forma milagrosa el portero Juanjo.

Fueron las dos únicas acciones reseñables de unos primeros 45 minutos en los que el partido parecía condenado al empate a cero. Además, la escuadra zamorana había perdido por lesión al único banda que creaba peligro como era Tejedor que fue sustituído por Mato.

Pero todo cambió tras el descanso por parte del equipo palentino que ya a los cinco minutos de la reanudación obligó a Juanjo a salir a los pies de Asier jugándose el tipo con la consiguiente tarjeta para el jugador del Palencia. Poco después era de nuevo Asier Alonso el que se escapaba por velocidad de los dos centrales zamoranos, Vilarchao y Manu Arias, pero su disparo ante el portero salió ligeramente alto.

Todo había cambiado y el GCE Villaralbo se mostraba incapaz de reaccionar ante la presión de su rival y el gol del Deportivo cada vez se veía más cercano. Pudo llegar en un disparo de Alvarez desde la frontal del área pero el balón tocaba en el pie de un defensa y salía desviado, y en el córner consiguiente se producía la ocasión más clara del partido al rematar de cabeza desde muy cerca Bayón, pero el esférico no quiso entrar en la portería de forma asombrosa.

Corría ya el minuto 74 y el gol palentino seguía sin llegar pese al acoso sobre el área del Villaralbo, ni siquiera en un magnífico disparo de Alvarez colocado a la escuadra que no entró de nuevo de milagro.

Pero el gol tenía que llegar y llegó en el minuto 81 en una escapada de Moré por la derecha que culminó con un centro que remataría Durantez en el segundo palo y esta vez sí quiso entrar el balón en la portería.

Con el tiempo prácticamente acabado, el Villaralbo no tuvo capacidad de reacción pese a que por aquel entonces ya estaban sobre la cancha Mato y Ballesteros.