El Fútbol Sala Zamora ha recibido un nuevo varapalo en forma de sanción. Tras la incomparecencia del equipo para disputar el encuentro ante el Gran Canaria, correspondiente a la jornada octava de Segunda División, lo que obligó a suspender el encuentro, el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol comunicó ayer que sanciona al conjunto zamorano como "autor de la infracción grave tipificada en el artículo 139-4c del Código Disciplinario de la RFEF, con el descuento de tres puntos de la clasificación general y declara vencedor del encuentro al Gáldar por el resultado de seis goles a cero" además de imponer a la entidad zamorana una multa económica.

El club ya anunció su intención de recurrir en el plazo máximo de diez días establecido y es que recordaron que no se presentaron a ese encuentro porque tenían a siete jugadores con una intoxicación alimentaria, algo que, afirman, está certificado con informes médicos que remitirán al Comité. Con esta decisión, y a la espera de presentar el recurso, el equipo continúa como farolillo rojo aunque ahora en negativo, con -2 puntos, y es que ya les quitaron otros dos hace algunas semanas por no pagar los arbitrajes. Mientras, la plantilla se entrena con la mirada puesta en Valdepeñas, el domingo a las 13.00 horas y a domicilio.