Messi no ha perdido ni un día en empezar a trabajar en su proceso de recuperación. Después de lesionarse el sábado, sufre una rotura del ligamento colateral interno de la rodilla izquierda, en el transcurso del partido con Las Palmas el argentino ya acudió ayer a la ciudad deportiva del Barcelona para proceder a la primera sesión rehabilitadora. Fue Luis Suárez el encargado de trasladar a Messi tanto desde su domicilio como de vuelta a él.

El periodo estimado mínimo de baja es de siete semanas, con lo que llegaría justo para el Madrid-Barcelona del 21 de noviembre. Sin embargo, tanto el jugador como Luis Enrique son optimistas después de haber recibido los informes médicos y cuentan con que el argentino podrá enfrentarse al Madrid en el primer gran clásico de la temporada.

El Barcelona tiene mañana partido de Liga de Campeones, ante el Bayer Leverkusen. Será la primera oportunidad para comprobar "la madera de que está hecho el equipo", como dijo Luis Enrique el sábado tras el partido con Las Palmas.