El escándalo desatado con la investigación abierta en la FIFA podría afectar a los Mundiales de Fútbol de Rusia y Catar. De hecho, la investigación del FBI sobre el órgano rector del fútbol incluye un escrutinio de la organización los mundiales de 2018 y de 2022.

Cualquier delito en relación a la adjudicación de las Copas del Mundo de 2018 y 2022, que Rusia y Catar niegan, podría ser considerado como "circunstancias imprevistas" garantizando una revisión, según consta en el artículo 85 de los estatutos de la FIFA, que se refiere a "circunstancias imprevistas y fuerza mayor".

En ese caso, el Comité Ejecutivo de la organización tiene la "decisión final sobre cualquier tema no establecido en estos estatutos". En realidad, nunca se ha hecho antes y no existe un procedimiento definido para ello pero, en teoría, retirarle la organización de un Mundial de fútbol a un país debería ser algo fácil.

Colombia era la sede asignada en 1986

La única vez en que un Mundial de fútbol masculino fue trasladado sucedió cuando Colombia optó por no organizar el evento de 1986, pero en ese caso se retiró citando problemas económicos. En mayo de 2003, el comité optó por trasladar el Mundial femenino de China, debido a un brote del virus de la gripe A.

Las reglas de la FIFA permiten que sus miembros, las 209 asociaciones de fútbol de todo el mundo, presenten mociones para que el órgano las vote. Esto puede ser usado por un miembro para proponer que la FIFA retire uno o los dos Mundiales. Algo así nunca sucedió antes por lo que no está claro cómo sería estructurada una votación. En la mayoría de los temas, la FIFA funciona sobre la base de una mayoría de miembros votantes que apoyan una moción.

Sin embargo, los obstáculos para una votación para quitar la organización de un torneo pueden ser altos si los votos sobre la expulsión o suspensión de sus miembros se toman como guía. La decisión sobre si llevar a cabo una votación para suspender o expulsar a un miembro de la FIFA requiere una mayoría de tres cuartos sobre los votos emitidos, dicen los estatutos.

Complicaciones políticas

Solo dos oportunidades se presentarán en el próximo año para introducir mociones semejantes, en el "Congreso electivo extraordinario" previsto entre diciembre de este año y marzo del 2016 o en el Congreso anual ordinario de mayo del 2016. Ejecutivos y funcionarios del deporte dijeron que será políticamente difícil impulsar una votación para quitar el torneo tanto en el comité ejecutivo como en el Congreso, en particular si no existen pruebas definitivas de delitos, informa Reuters.

En el caso de Catar, quitarle el torneo sería visto como un desaire político al mundo árabe, mientras que Rusia, ya enfrentada con Occidente por la crisis en Ucrania, tomaría la decisión como una medida diplomáticamente hostil.

Aunque ya se han acordado miles de millones de dólares en contratos en relación con los torneos, esto no representaría un gran obstáculo para trasladar el Mundial. Un funcionario de un grupo de televisión con derechos para ambos torneos dijo que esperaban mantener los contratos sin importar el lugar donde se dispute el Mundial.