El GCE Villaralbo perdió el partido en el descuento. Los pupilos de Fuentes dieron la cara ante un equipo que a día de hoy juega otra liga pero que se tuvo que bajar al barro hasta las postrimerías para doblegar al cuadro zamorano. Villa empató de penalty pero Cabezudo aprovechó que después de una serie de carambolas el balón fue a caer en sus botas para matar el partido en el 92.

La primera oportunidad fue para el Deportivo Palencia en el minuto uno. Los locales buscaron en balón largo la testa de Diego Torres que peinó para la llegada desde segunda línea de Iván. El cuero lo empaló aprovechando el bote pero salió por encima del arco de Ángel. La replica del GCE Villaralbo llegó en el minuto 8 en un contragolpe. Ayrton le roba la cartera a la defensa, conduce hasta el área, se planta en los dominios de Carmona y sólo ante el arquero la pica. El balón llorando se escapó por poco rozando la cepa del palo. Los zamoranos aguantaban atrás hasta que en el minuto 13 el colegiado decretó pena máxima por agarron dudoso de Jony dentro del área. Era ocasión manifiesta de gol pero Diez Cano decidió sólo amonestar al zaguero. El pichichi de la categoría, Diego Torres, se colocó en los once metros y engañó a Ángel que no pudo hacer nada porque los locales cobrasen ventaja. Poco después hubo otra caída, esta en área del Deportivo Palencia por presunto derribo de Iván Pelayo sobre Villa. En esta caso el árbitro entendió que hubo simulación del centrocampista zamorano y le enseñó amarilla por entender que se tiró el sólo. El Palencia Balompié pudo ampliar poco después la ventaja. Gran internada de Moré por el perfil diestro. La pelota iba teledirigida al corazón del área. Dos efectivos morados entraron al remate pero es esferico se paseo de derecha a izquierda por el área. La banda derecha fue un filón para los locales. En el minuto 35 entró por ese mismo perfil Adrián. El lateral ganó línea de fondo, centró encontrando a Moré que empaló de primeras un disparo que se escapó alto. Los zamoranos encontraron como úna de las escasas vías para generar peligro el balón parado. En el minuto 38 Villa botó una falta desde la derecha que encontró a Vilarchao en el segundo palo. El cuero iba muy fuerte y el central no pudo precisar el remate a pesar de estar libre de marca. Con el dominio local se llegó al final de la primera mitad. Los palentinos pusieron sobre el césped las ocasiones más claras y el único tanto que llegó de penalty dudoso.

Tras la reanudación el Palencia Balompié volvió a tomar los mandos del juego apostando por la posesión de balon y por ende el control del juego. Por su parte los zamoranos esperaron agazapados atrás buscando balones largos. Y en uno de ellos pudo empatar. Pelotazo desde la zaga que llegó a Ramón, la acomodó dentro del área y su disparo lo detuvo Carmona cuando habian transcurrido 55 minutos de juego. Segundos después Pelayo tuvo en sus botas la oportunidad de abrir brecha en el electrónico. El mediocentro se marchó en acción individual después de un gran reachace, disparó cruzado y Ruiz se echó al suelo con todo para taponar el tanto.

Y entre las alternativas en cuanto a ocasiones llegó el tanto del empate de la misma manera que llegó el gol en la primera parte, desde los once metros. Diez Cano entendió que hubo empujón sobre Vilarchao y pitó penalty. Villa fue el encargado de tirarlo con mucha sangre fría a lo Panenka despistando a Carmona que se fue para un lado. En el minuto 70 Ayrton pudo adelantar a los zamoranos después de un cabezazo a la salida de un córner pero el rematé se escapó ligeramente a lado del palo izquierdo. Sin duda el tanto del empate fue una bocanada de aire fresco para un GCE Villaralbo que se convirtió en un rival muy incómodo. Sin embargo cuando mejor estaban los visitantes sufrieron un contratiempo importante. En el 81 Jony vio la segunda cartulina por claro agarron y dejó al equipo con diez.

El Palencia asedió pero cuatro minutos después volvió la igualdad numérica al césped. Durántez vió la segunda catulina por una patada a destiempo. Los morados con más urgencias y en plena lucha por el ascenso apretaron más en el tramo final y se llevaron la victoria. Avisó Hector con un cabezazo después de córner que se escapó por poco y ya en el descuento los locales hicieron el 2-1 definitivo. Después de una serie de carambolas en el área el balón cayó muerto en las botas de Cabezudo. El jugador local empaló un disparo seco y ajustado al palo ante el que Ángel hizo la estatua. Sin margen de maniobra, al GCE Villaralbo no le quedó tiempo para intentar empatar un partido en el que dio la cara en todo momento.