Embutidos Ballesteros regala un solvente triunfo al club amarillo

Si un pero se puede poner a los hombres de David Barrio es que no comenzaron el encuentro todo lo enchufados que debieran. Quizá porque enfrente estaba el colista, y se presumía una tarde sin sobresaltos.

Pero, a pesar de que Bosa abrió el marcador con un triple a los pocos segundos, Leyma Coruña comenzó más entonado que los amarillos y tomó ventaja en el marcador rápidamente (3-6, m. 3). Una renta que tenía su base en las pérdidas zamoranas y que llegó a ser de seis puntos. Pero el buen parcial favorable de los gallegos terminó como empezó, con un triple de Bosa que permitió a Alfredo, también desde el perímetro, adelantar a los locales que, sin embargo, cerrarían por debajo el primer parcial (20-21).

Embutidos Ballesteros ya había despertado y lo demostró en un gran segundo periodo. Con una defensa más intensa y dominando el rebote, comenzó a acribillar al colista. Todos los locales sumaban y la distancia, poco a poco, se hacía más grande hasta llegar a ser de 17 puntos al paso por vestuarios.

Tras el intermedio, el bloque de Barrios amagó con volver a repetir sus errores pero, tras un parcial de 0-4 y tiempo muerto del técnico, los amarillos gestionaron sin ningún apuro su ventaja con buenas acciones en el bloqueo y continuidad que les permitió llegar en clara ventaja al último periodo (55-37). El choque parecía sentenciado, pero al Embutidos Ballesteros le tocó remar aún un poco más.

Leyma Coruña apostó por los triples en el último parcial, que abrió con un 0-9 que ajustaba diferencias. Los coruñeses se aplicaron al máximo y llegaron a ponerse a siete pero, entonces, aparecieron Claver y Geladozonia para con buenas acciones en la pintura. Sus canastas forzaron a los visitantes a un estéril carrusel de faltas que no alteró lo esperado, un cumpleaños feliz.