El Zaragoza cierra hoy la vigésimo séptima jornada de liga contra el Granada en un partido que en la capital aragonesa se considera trascendental para un equipo que todavía no conoce la victoria en 2013 y al que solo los malos resultados de los equipos de la zona de descenso le han impedido entrar en ella.

El conjunto maño, que marca la línea de la salvación, es consciente de que hasta ahora sus rivales en dicha zona le han dado una tregua porque han sumado puntos con cuentagotas, pero dicha circunstancia ya ha empezado a cambiar con la victoria el Mallorca en esta jornada.

Para impedir verse abocado a pozo del descenso es necesario ganar en casa, algo que no ocurre desde la visita del Deportivo de La Coruña el 10 de noviembre de 2012.

Para este enfrentamiento el técnico zaragocista no podrá contar con Loovens, por sanción así como Apoño y el guardameta titular, Roberto, ambos baja por lesión. Tampoco Wílchez ha entrenado por problemas físicos, aunque es un jugador que apenas cuenta para Jiménez.

La duda para Manolo Jiménez podría estar en el sistema de juego a elegir, si el 4-2-3-1 o bien con un trivote. En función de esto variaría algún que otro jugador en el once titular.

Por su parte, el Granada, también con la «soga al cuello», acude a Zaragoza con la intención de ganar, o al menos puntuar, para cortar su mala racha de resultados y mantenerse con vida.

Alcaraz cuenta con varias bajas para el choque en su equipo, la última la del centrocampista franco argelino Brahimi. Tampoco estarán el ariete Carlos Aranda, Dani Benítez, Fran Rico, Hassan Yebda y Pape Diakhaté.