El doble campeón mundial español de Fórmula Uno, Fernando Alonso (Ferrari), declaró ayer durante un acto que tuvo lugar en la ciudad financiera del Banco Santander, patrocinador de su escudería que «el año que viene tiene que ser mejor sí o sí». Alonso efectuó estas declaraciones antes de un doble evento en el que primero respondió a preguntas de un grupo de niños, a los que obsequió con regalos y después participó -acompañado por el presidente del Banco Santander, Emilio Botín- en la inauguración de la pista de El Bosque, en la ciudad financiera de la localidad madrileña de Boadilla del Monte, donde el doble campeón mundial asturiano participó en una carrera de un kilómetro junto a cien empleados del banco, con motivo de una acción solidaria.

Alonso declaró que «peor» que este año no podrá empezar el que viene. «Peor arranque es imposible. Estábamos a dos segundos y medio en Jerez cuando pusimos el coche en la pista. Es casi imposible que sea peor. Espero un arranque mejor», apuntó.

«Red Bull seguramente será favorito para empezar. Han acabado (el año) con un dominio bastante fuerte y al mantenerse más o menos las reglas, aunque han cambiado un poco los test de flexibilidad del alerón delantero y cuestiones del DRS, en general la ventaja que tenían a final de años, de siete u ocho décimas es la que tenemos que recuperar en dos meses, cosa que no es fácil», declaró. «Por tanto, habrá mucho trabajo que hacer, pero el punto de partida será mucho mejor que este año. Algo que no será muy difícil», explicó Alonso, campeón del mundo en 2005 y 2006 (con Renault) y que esta temporada cedió, por sólo tres puntos, el título al alemán Sebastian Vettel (Red Bull), que en el Gran Premio de Brasil, en Sao Paulo, festejó su tercera corona consecutiva. Cuestionado por Efe acerca de la búsqueda de los límites que otros habían llevado al extremo esta temporada, Alonso no quiso entrar en polémicas. «Ha habido varios episodios en los que siempre han estado al límite otros equipos y nosotros no», indicó.