El palista zamorano Emilio Merchán, que prosigue los entrenamientos tras participar en la primera prueba de la posible K-4 española que buscará el pase para Londres 2012, dijo ayer, coincidiendo con su trigésimo quinto cumpleaños, que sus cuatro títulos mundiales son «solo un aval» ante el reto de conseguir la clasificación para sus terceros JJOO.

Emilio Merchán (Zamora, 29 de febrero de 1976) es cuádruple campeón mundial, en tres ocasiones en maratón y en una en aguas tranquilas, vigente medalla de bronce europeo en K-2 1.000 metros y ganador del Descenso Internacional del Sella también en cuatro ediciones.

Incluido por el ADO entre los catorce deportistas españoles becados con la ayuda de máxima cuantía, cuenta con un quinto puesto en los Juegos Olímpicos de Atlanta'96, logrado en K-4, y un noveno en Sydney 2000, en K-1 en 1.000 metros.

Junto a los tres títulos mundiales de maratón -dos en K-1 y uno en K-2- atesora el de K-2 1.000 metros, junto a Diego Cosgaya, de Palencia, logrado en 2009 en Canadá en la modalidad de aguas tranquilas.

Merchán pertenece, entre los más de cien mil deportistas que reúnen los 27 Juegos de Verano disputados, a ese atípico grupo, integrado por menos de un centenar de participantes olímpicos, nacidos el 29 de febrero, por tanto en año bisiesto.

Disfrutando de su plenitud deportiva, el piragüista zamorano, aspirante a competir en Londres en K-2 1.000 metros, añade la opción de una doble participación con la posibilidad de hacerlo también en K-4, una embarcación que revaloriza actualmente con su presencia en el proyecto impulsado por la Federación Española de Piragüismo.

Si bien sus éxitos en Mundiales y Europeos los ha conseguido cuando su edad se adentraba en la treintena, su trayectoria se remonta en el tiempo a Atlanta'96, donde el entonces veinteañero integró el K-4 español que logró la quinta plaza.

En aquella cita olímpica coincidió con la alemana Birgit Fischer, la piragüista más laureada de la historia, poseedora de 12 medallas olímpicas -ocho oros y cuatro platas-, y formó parte de la selección española, que con 19 palistas tenía en la sevillana Beatriz Manchón, a la más joven del equipo, mientras que el más veterano, con 33 años, era Juan José Román Mangas, actual presidente de la Federación Española y ex entrenador de Emilio Merchán.

Repitiendo el desencanto que ya había encajado en Barcelona'92 y Seúl'88, España regresó de Atlanta sin medallas.

Cuatro años más tarde, en Sydney 2000, Merchán fue noveno en K-1 1.000 metros en una final en la que puede «presumir» de haber paleado junto al noruego Knut Holman y el búlgaro Peter Menkov, dobles campeón y subcampeón olímpico en 1.000 y 500 metros, respectivamente en aquella competición.

El podio de la final lo completó un joven Tim Brabants, hoy vigente campeón olímpico en 1.000 y bronce en 500, y referencia del equipo inglés para los Juegos que acogerá Londres apenas dentro de unos meses, los que Merchán aprovechará para buscar el pasaporte que le permita disfrutar de la que sería su tercera participación olímpica.