Si el empate de Inzamac Zamora ante Peguform SAR dejaba un sabor agridulce en el paladar justo al término de la contienda, el paso de los días intensifica dicho gusto pues la escuadra de Eduardo García Valiente continúa situado en los últimos puestos de la clasificación, pero al menos mantiene la ventaja de la que gozaba al inicio de la última jornada con los equipos que ocupan la zona de descenso.

El primer punto de la temporada que se suma a la cuenta de Inzamac Zamora y que no se ha obtenido en el «Manuel Camba» ha llegado en un momento realmente oportuno.

Los «guerreros de Viriato» cuajaron un partido irregular ante el Peguform SAR, con una mala primera parte y una destacada segunda mitad, pero consiguieron firmar unas tablas (32-32) que tienen más valor que un punto para la escuadra de la capital del Duero.

Con este empate, Inzamac Zamora no sólo conserva su renta sobre el bloque de Javier Barrios (cuatro puntos), sino que ya tiene ganado el golaverage a los redondelanos. Un hecho que puede considerarse como un punto más con respecto a este equipo en la pelea por eludir el descenso. Pero la parte positiva de sumar este punto no queda ahí.

El duodécimo clasificado, posición que los pupilos de García Valiente hubieran mantenido sin problemas pese a perder, no pierde de vista a ninguno de sus rivales directos dado los resultados de la jornada. Marcadores tras los cuales Inzamac Zamora cuenta con un punto más de ventaja sobre el Base Oviedo, acorta distancias con BM Cisne y no deja escapar a su más próximo adversario, Cafés Toscaf.

De hecho, la plantilla avilesina no sólo se erige como el rival más inmediato de los zamoranos, sino como uno de los más duros; una circunstancias que se puede deducir de la excelente remontada que están protagonizando y cuyo último paso tuvo lugar en el duelo ante BM Porriño, con el que firmó un empate a 30 tantos.

Una mejoría que también está evidenciando Base Oviedo, aunque en este caso su progresión no tenga repercusión en la tabla. Los ovetenses perdieron 26-23 ante Paraxe Construcciones y son el nuevo «farolillo rojo» de la competición.

Otro de los equipos que tampoco están firmando buenos resultados en este inicio de año es el BM Cisne, aunque hay que tener en cuenta que los pontevedreses cayeron en su último choque ante el Medicentro Gijón (26-36).

La escuadra que dirige Alberto Suárez no baja el pistón y continúa encabezando la tabla, ahora con nueve puntos de ventaja. Una renta que es producto, principalmente, de las derrotas sufridas por el segundo clasificado (26-28), Mecalia Novás, a manos del Magope Seis do Nadal (sexto en esta jornada), y Las Cinco Jotas Lavadores, que perdió ante Embutidos Lalinense (26-31) y baja hasta la séptima plaza mientras los de Miguélez se colocan cuartos empatados a puntos con Chapela y Calvo Xiria, que venció al único equipo en tierra de nadie OAR Coruña (35-33).