Arcebansa 2

ElPozo B 1

Arcebansa Zamora: Palomo, Juanpe, Pipe, Lolo Jarque y Carracedo -cinco inicial-. También jugaron: Dani Rodríguez, Javi Serrano, Jonatan, Saúl, Carlos Alberto.

ElPozo Ciudad de Murcia: Raúl, Lolo, Alex, Castilla y Jesús -cinco inicial-. También jugaron: Bebe, Juampi, Panu, Enrique y Javaloy.

Goles: 1-0, min.18: Pipe remacha en segunda jugada tras una gran parada del meta visitante a tiro de Carlos Alberto; 1-1, min.36: Álex fusila a Palomo en un contragolpe mientras el Arcebansa estaba en superioridad; 2-1, min.37: Juanpe empuja en el segundo palo un disparo cruzado de Carlos Alberto.

Árbitros: Dirigieron el partido los colegiados cántabros Arce Ruíz y De Juana González. Mostraron amarilla al local Lolo Jarque y a los visitantes Jesús, Juampi, Castilla y Alex. Expulsaron por doble amarilla al visitante Bebe (mins.28 y 36).

Incidencias: Partido disputado en el Pabellón Municipal Ángel Nieto ante cerca de 1.200 espectadores. En los prolegómenos del duelo se realizó la foto de familia de la cantera y el capitán Javi Serrano dedicó el trofeo de «Mejor Afición de División de Honor» a los aficionados. En el descanso se entregaron los trofeos del 3x3 del «Día del Fútbol Sala» que se celebró por la mañana en La Marina.

Traje negro, corbata azul, camisa morada con rayas blancas y la cabeza pelada. Así vestía ayer el «cazafantasmas» que se acercó por el Pabellón Municipal Ángel Nieto para tratar de espantar el mal fario que se había instalado en el recinto deportivo durante los últimos meses. Hablar de un partido igualado la temporada pasada en Honor era decir decepción. Guadalajara o Cartagena fueron los casos más flagrantes. Dianas a falta de seis y tres segundos respectivamente dieron al traste con la permanencia del equipo tricolor en la máxima categoría.

Ayer, el Ángel Nieto acogía una película similar, pero nadie contaba con que el «cazafantasmas», Juanito, estaba en el banquillo, y sus pupilos en la cancha para acabar con ese pesimismo que contagiaba al respetable zamorano en los últimos minutos.

El Arcebansa entró en los últimos tres minutos con un exiguo 2-1 en el marcador y el talentoso rival, el filial de ElPozo, apostó por jugar con portero jugador. Tiros, llegadas, ocasiones, pero todas acababan desbaratadas de una u otra forma. Palomo, excepcional en el 99 por ciento del partido, Juanpe, Dani Rodríguez, Pipe, y compañía, se emplearon a fondo para evitar otra decepción postrera.

La afición se mordía las uñas y quien más o quien menos pensaba ya en el mal fario de la temporada pasada. Pero la bocina sonó y los tres puntos se quedaron en casa. Los fantasmas, espantados. O al menos eso se espera desde el seno del vestuario. Ahora se pide confianza, tener pensamientos positivos. Algunos dicen que la ciencia noética es cierta, y que si mucha gente piensa algo, acaba cumpliéndose como si una fuerza física se hiciera presente. Pues eso, a tener paciencia y sobre todo confianza en los últimos minutos igualados. Seguro que habrá muchos. Ayer se solventaron y la afición, que volvió a estar al lado del equipo, se mereció el triunfo más que nadie. Era su día. Con la entrega del premio a la «Mejor Afición de División de Honor», los tres puntos fue el regalo que los jugadores quisieron hacerle, como dijo el capitán al término del partido.

El apoyo fue máximo, y eso que el duelo estuvo cargado de tensión. Una tensión que hacía que los músculos se agarrotasen y la voz se quebrara. Los nervios se apoderaron de los presentes durante gran parte de la contienda. Pese a ello, los seguidores se volcaron con el equipo.

Cierto es que el choque no fue excesivamente brillante. Aunque depende de qué se entienda por brillantez. Hubo trabajo en equipo, solidaridad, esfuerzo con el compañero y muchas narices sobre el cuarenta por veinte.

Falto chispa en algunos momentos. Pero eso lo dan las individualidades, y de momento no existen. Trabajó bien Carlos Alberto, que está llamado a marcar la diferencia arriba. También tuvieron presencia en ataque Pipe y Juanpe, de ellos fueron los tantos. Y el equipo se sumó a las jugadas colectivas.

Decía cierto jugador del Atlético, que quien quiera espectáculo que se marche al circo. En deporte primero hay que ganar, y después agradar. El Arcebansa va por ese camino. En Tobarra ganó sufriendo, y ayer cambió logró los tres puntos a base de fe. El equipo por encima de todo. Ya llegarán mejores tiempos para la lírica con mejor juego, combinaciones más rápidas y chispazos de algún «crack», que los hay.

Esta claro que para las edificaciones siempre se empiezan por los cimientos y ahí está ahora el FS Zamora. Dos goles recibidos en los dos últimos duelos son guarismos casi inmejorables. Esa media da el éxito seguro. Pero es complicado.

Esa seriedad atrás quedó patente desde la primera parte. ElPozo Murcia B apenas contó con ocasiones. Se desesperó lanzando desde media distancia y encontrando a Palomo en la meta. No sabían lo que les esperaba en la segunda parte.

Por su parte, el Arcebansa gozaba de ocasiones más claras, como dos mano a mano de Jarque ante el meta, y la parada in extremis de un defensa bajo palos. Pero se hizo justicia y a falta de dos minutos para el descanso Pipe adelantó a los de Juanito. Tuvo que lanzar dos veces el Arcebansa para anotar, ya que el meta volvió a emplearse a fondo. Con ese 1-0 se llegaba al descanso.

Tras el asueto, ElPozo se adueñó del balón y el Arcebansa se limitó a salir a la contra. Le hubiera salido bien la jugada si el olfato goleador de los locales estuviera más desarrollado. Lástima que los artilleros del Arcebansa estén aún aletargados.

Tanto perdonó el FS Zamora que los murcianos seguían metidos en el partido. Palomo era un espectáculo en la meta y se ganó una gran ovación de la grada. Lástima que el empate llegará en un pequeño error suyo.

ElPozo, con tres hombres de campo por expulsión de Bebe, logró el empate a falta de cuatro minutos. Palomo se quedó demasiado metido en su meta y no pudo salir a cortar el balón largo lanzado por el portero murciano. Alex fusiló para poner el empate y sembrar el pánico.

Menos mal que un par de jugadas después Juanpe hacia el, a la postre, gol del triunfo. Tiro de Carlos Alberto al segundo palo y remate del madrileño.

Éxtasis en los graderío y a sufrir. A partir de ahí, la película se ha narrado al principio. Tensión, nervios, sudores, casi lágrimas, pero por fin el guión cambió. El Arcebansa aguantó en inferioridad y sumó los tres primeros puntos en un Municipal Ángel Nieto que necesita este tipo de cosas para creer.

A ver si este triunfo trabajado sirve para espantar definitivamente los fantasmas del pabellón zamorano y el «12+1» vuelve a ser un fortín inexpugnable.

Tarde, por tanto, perfecta para un Arcebansa que con tres puntos en el bolsillo duerme más tranquilo esta semana, a la espera de visitar Cáceres.