El ganador de la etapa de hoy de la Vuelta 2010, Mikel Nieve (Euskaltel Euskadi), ha dedicado la victoria a su jefe de filas, Igor Antón, que se tuvo que retirar el sábado por una caída siendo líder de la carrera.

"Esto va para él, que iba a ganar la Vuelta, seguro", ha dicho el corredor navarro, de 26 años, nada más cruzar la línea de meta tras la que ha sido la primera victoria en sus tres años de corredor profesional.

Al respecto de la etapa, se ha congratulado de que haya tenido éxito la "locura" que ha intentado su equipo, atacando ya en el Puerto de San Lorenzo, el primero de los tres altos de primera categoría que tenía la etapa de hoy.

"Muy bien, muy bien, no me lo creo. Ha sido impresionante. Hemos hecho una locura, porque hemos salido ya en San Lorenzo, y ha salido. La táctica ha salido perfecta", ha apuntado, acordándose también de los "amigos" que se acercaron el domingo "a los Lagos" de Covandonga a animarle.

Nieve ha destacado la carrera de todo el equipo, pero especialmente de "Juanjo (Oroz)" y "Amets (Txurruka)" que le acompañaron en la escapada. Al respecto de la última subida, ha dicho que, "a pesar de conocerla, los últimos kms. se han hecho muy duros".

Tras la victoria, Nieve, que se ha colocado undécimo, a 6:30 del maillot rojo, no se plantea la clasificación general porque cree que perderá mucho tiempo en la contrarreloj de Peñafiel. "No sé ni cómo está la clasificación, pero en la crono puedo perder hasta 5 minutos y, aunque hay otra etapa buena todavía (la que termina en la Bola del Mundo) ni me planteo la general", ha asegurado.

El corredor del Euskaltel se ha acordado del "golpe duro" que fue para su equipo la retirada de su líder y también de la conjura que hizo "para dar la vuelta" a las cosas y recobrar protagonismo en carrera.

Nieve es de Leiza, un pueblo fundamentalmente de pelotaris como Abel Barriola y Oinatz Bengoetxea, "Bengetxea VI", ambos vencedores en la última década del campeonato más importante de Pelota Vasca, el Manomanista. "Es un pueblo pequeño y nos conocemos todos. Y, aunque allí casi todos juega a pelota, seguro que se también se alegran por mí", ha apuntado.