M-Cell Algés: Mills (25), Oliveira (13), Fosaca (3), Filipe (5), Robinson (24) -quinteto inicial - Ramos (4), Alves (-), Cruz (-), Carvalho (-), Lopes (-), Foneio (2), Coelho (-).

Caja Rural Valbusenda: Gesteira (4), García (16), Cuevas (21), Gimeno (4), Sánchez (5) -quinteto inicial- Miguel (-), Chumillas (12), Parham (5).

Árbitros: Sánchez y Arranz. Sin eliminadas.

Incidencias: Partido disputado en el pabellón municipal de Íscar (Valladolid).

Manuel Herrera

El Caja Rural Valbusenda perdió ante en M-Cell Algés de Primera División portuguesa en su primer duelo de pretemporada. Las jugadoras de Juan de Mena dieron una gran imagen, pero el cansancio acumulado en los primeros días de trabajo y las pocas horas de entrenamiento con balón hicieron que el conjunto naranja no pudiera sacar el partido adelante.

El duelo sirvió para comprobar cómo el equipo muestra buenas maneras de cara a la próxima temporada y para ver en acción a dos de los nuevos fichajes del conjunto dirigido por Juan de Mena: Berta Chumillas y Aja Parham. Ambas cuajaron una buena actuación en el encuentro, sobre todo la burrianense, que dirigió con clarividencia el juego de las naranjas y defendió y recuperó balones hasta que le duraron las fuerzas.

Parham, por su parte, acusó la falta de rodaje y los efectos perniciosos del viaje que realizó el miércoles. Pese a ello, la americana se mostró como una jugadora ágil y con clase, que puede aportar mucho tanto en defensa como en ataque.

En cuanto al resto de las jugadoras, todas notaron el desgaste del intenso trabajo al que se están viendo sometidas en la pretemporada. Sin embargo, Aitana Cuevas y Alba García demostraron que están un punto por encima del resto en este arranque de temporada. La ex del Majadahonda realizó un gran primer tiempo y sujetó al equipo en los momentos en los que parecía que el M-Cell Algés podía despegarse en el marcador. Por su parte, la fuenlabreña dirigió al equipo durante el tercer cuarto en los que fueron los mejores minutos de Juan de Mena y anotó 16 puntos gracias a su gran acierto de la línea de tres.

En cuanto al desarrollo del encuentro, las jugadoras portuguesas salieron más enchufadas a la pista del pabellón de Íscar. Kate Mills y Robinson en la pintura y Oliveira desde el exterior permitieron a las lisboetas despegarse en el marcador en los primeros minutos ante un conjunto zamorano que no parecía saber muy bien cómo parar la avalancha de las portuguesas.

Sin embargo, el Zamarat reaccionó, ajustó sus fallos defensivos y comenzó a asentarse sobre la pista bajo la dirección de sus jóvenes bases: Sara Sánchez y Berta Chumillas. Así las cosas, el marcador se mantuvo equilibrado hasta el descanso.

Tras el paso por vestuarios, el Zamarat se adueñó de la situación y, bajo la dirección de García logró su máxima ventaja (42-49 en el minuto 24). Sin embargo, el empuje de un equipo potente como es el lisboeta, que incluso va a jugar FIBA Cup, y el desgaste físico de las jugadoras hizo que el M-Cell Algés volviese a darle la vuelta al partido.

Al final, las jugadoras naranjas cayeron por 9 puntos de diferencia, tras el empujón final del equipo luso, comandado por Robinson, que decidió el encuentro a favor de su equipo. Una derrota que, sin embargo, deja buen sabor de boca, y es que, a falta de la llegada de una jugadora más y de la recuperación de Daira Varas, este equipo tiene buena pinta.