A pesar de que la derrota ante uno de los líderes de la categoría podía hacerse predecible, el técnico del GCE Arcebansa, Miguel Angel Hernández, abandonaba el partido triste; no por la actuación del equipo, que cuajó un partido muy completo -a excepción de los últimos minutos- sino por la actuación arbitral, que sin ser determinante, sí ayudó a que los baleares pudieran voltear el marcador. «Está claro que el Fisiomedia Manacor es un equipo que está por encima de nosotros y que nos ha vencido justamente, pero la actuación arbitral ha dejado mucho que desear. Cuando nosotros teníamos el partido en un lugar donde queríamos, jugando a favor del marcador y sin dejar huecos a los atacantes de Manacor, los colegiados han tomado decisiones muy polémicas en sus cuatro primeros goles. Es una pena que ayuden a un equipo que no lo necesita, pero ya sabemos que estos árbitros eran muy caseros, puesto que lo comprobamos en el partido que jugamos ante Ibiza en la primera vuelta», afirmaba Miguel Angel Hernández.
A pesar de esto, y que la derrota ya estaba en la maleta, el técnico del GCE Arcebansa quiso quedarse con las cosas positivas y los aspectos que el equipo va recuperando, sobre todo en la defensa: «Afortunadamente hemos recuperado nuestra identidad y hemos vuelto a ser un equipo que defiende como debe. Estoy seguro que si jugamos como los primeros veinticinco minutos de hoy, vamos a ser muy competitivos en el resto del campeonato. Lo que está claro que hoy, a pesar del resultado, hemos tuteado a un equipo que va a luchar por acabar primeros».
Otro punto para la esperanza es que durante esta semana se pueden unir al grupo dos componentes más, Adriá Esteller, que se perdió el partido por lesión, y el nuevo fichaje del equipo, Claudinho: «Es un buen comienzo, para que con las incorporaciones de Adriá y de Claudinho este lunes, podamos afrontar con sumas garantías todos los partidos. Pero hay que tener claro que ningún equipo va a regalar nada porque todos nos estamos jugando algo, y los planteles de abajo están apretando». La duda estriba en la presencia de Bruno, que acabó el duelo lesionado.
Tras esta derrota, el técnico rojiblanco ve obligada la victoria en el partido del próximo sábado ante el Ibiza: «El partido del sábado ante Ibiza, que nos ganó en la ida, va a ser una auténtica final para que demos de una vez un golpe de timón a la situación; ya que el juego mejora con los días pero los resultados siguen siendo negativos. Por eso necesitamos la victoria cuanto antes. Por eso, volverá a ser importante el apoyo de una afición que debe seguir con nosotros».
