Entrevista | Alicia Macanás y Fran Parisi Músicos

Minimal Schlager: "Intentamos crear una etiqueta propia, que la gente nos escuche y diga: ‘Suena a Minimal Schlager’"

Estos dos hermanos murcianos, destacados como autores del Mejor Álbum de Otras Tendencias en los últimos Premios de la Música de la Región, son una de las revelaciones de la temporada en la escena autonómica

Fran Parisi y Alicia Macanás, Minimal Schlager.

Fran Parisi y Alicia Macanás, Minimal Schlager.

Asier Ganuza

Los Premios de la Música de la Región de Murcia llamaron la atención sobre Minimal Schlager. Se impusieron con Love, Sex & Dreams (2022) en la categoría a Mejor Álbum de Otras Tendencias, por delante de Fur Voice (Passion tuning) y Yuss Cawa (Intuición). Para entonces ya habían ofrecido alguna actuación por estos lares a finales de noviembre, pero su minigira española –también pasaron por Madrid, Barcelona y Gijón– tan solo era una parte del LSDTour, gracias al cual han podido presentar sus nuevas canciones en hasta siete países. Y antes estuvieron en el prestigioso SXSW de Austin (Estados Unidos), con lo que la repercusión internacional de estos dos hermanos murcianos, Alicia Macanás y Fran Parisi, parece garantizada. Ahora solo falta que en ‘casa’ nos demos cuenta de que tenemos una banda muy interesante navegando las intensas aguas del underground londinense y berlinés (ella reside en Reino Unido;él, en Alemania). Amparados por un delicado y contemporáneo synth-pop de reminiscencias ochenteras, Minimal Schlager responden a las preguntas de La Opinión.

¿De dónde sale Minimal Schlager? ¿Qué les lleva a unir fuerzas para dar forma a un proyecto tan particular como éste?

Fran Parisi: Siempre hemos hecho música juntos, aunque más tirando al punk y al noise. Pero esta vez me compré una drum machine [una caja de ritmos] y de repente la cosa cambió; decidimos explorar un lado más pop.

Ha sido en este 2022 cuando el nombre de Minimal Schlager ha empezado a sonar con fuerza, pero la banda lleva en marcha, mínimo, desde 2019...

Alicia Macanás: Comenzamos la primera demo en octubre-noviembre de 2019, por lo que la pandemia ralentizó nuestro debut en los escenarios, pero aprovechamos ese tiempo para trabajar en casa y encontrar nuestro sonido. También hicimos colaboraciones muy interesantes en la escena berlinesa, como una canción de navidad con Eddie Argos (Art Brut) y Laura Lee, el videoclip/corto de FMB –con muchísimos artistas involucrados–, el EP… Yo iba y venía de Londres a través de aeropuertos vacíos.

No debe ser sencillo iniciar un proyecto y darse de bruces con una crisis sanitaria global...

A. M.: No. Ya te digo, nuestro primer concierto lo dimos cuatro meses después de lo previsto. Y había como unas veinticinco personas sentadas en el bar y varias más viendo la retransmisión, mientras nosotros estábamos a tope en el escenario. Fue una experiencia surrealista. Poner en perspectiva algo tan normal como bailar en un concierto…

En marzo de 2021 lanzaron su primer EP, Voodoo Eyes, que les ayudó a posicionarse, y hace unos meses, en septiembre, se publicó por fin su primer largo, Love, Sex & Dreams. Y la recepción, por parte al menos de los entendidos, está siendo realmente buena.

F. P.: Estamos muy contentos con la recepción, sí. La verdad es que nos ha pillado un poco por sorpresa, sobre todo teniendo en cuenta que es la primera vez que publicamos un disco... Pero nos está permitiendo tocar en muchos sitios nuevos, conocer otros artistas y pasárnoslo genial.

Su participación en marzo en el SXSW de Austin supongo que ha ayudado a dar a conocer internacionalmente a Minimal Schlager..., quizá también su versión de Disorder, de Joy Division.

F. P.: Sí, Disorder pegó muy fuerte en México y por el uso horario casi ni nos enteramos. Cuando me desperté y vi todas las notificaciones aluciné. Y sí, la experiencia en SXSW fue increíble... Piensa que era nuestro primer festival y compartíamos cartel con Beck y Dolly Parton, entre otros; qué más te puedo decir...

Eso sí, conviene aclarar que este álbum sobre todo se está moviendo en el underground londinense; pero, claro, es que, aunque murcianos, hablamos de un proyecto anglo-germano a todos los niveles, tanto por residencia de sus miembros como, diría, por influencias y enfoque. ¿Cómo viven esa naturaleza tan particular?

F. P.: Bueno..., es interesante porque en Londres y Berlín se ve como un proyecto muy español; ya sea por la temática o el color casi eufórico de las canciones. Pero, por otro lado, sí que estamos explorando un tipo de música que no se ha dado tanto en España, como el krautrock o la synthwave.

De hecho, el LSD Tour les ha traído por aquí, pero también les ha llevado por Reino Unido, Alemania, Hungría, Austria, Suiza... No es fácil que una banda tan joven y que enfrenta sus primeros conciertos monte una gira tan internacional, pero parece que han dado con la tecla, que Minimal Schlager gusta en Centroeuropa.

A. M.: ¡Sí! Al final es cuestión de arriesgarse y salir un poco de casa. Cuando volvimos de Texas nos dimos cuenta de que estar de tour nos daba la vida y nos obligaba a seguir evolucionando. Y organizamos un concierto en Francia, y luego salió otro en Suiza, luego en Austria… y al final giramos por siete países. ¡A ver si podemos organizar más fechas por España!

¿Volverán pronto a la Región?

A. M.: ¡Eso espero!

De todas formas... hace muy poco lograron un reconocimiento importante en ‘casa’: el galardón al mejor álbum de la categoría ‘Otras Tendencias’ en los Premios de la Música de la Región de Murcia. ¿Qué significa para ustedes esta distinción?

A. M.: No nos lo esperábamos en absoluto. La prensa murciana no se había hecho eco de nuestra música, ¡ni siquiera nos habíamos apuntado! Después de tantos años trabajando fuera, sin ser de aquí y ni de allá, fue muy bonito recibirlo. A ver si gracias a esto nos tienen en cuenta y nos invitan a tocar en la Región, en sala o en festival.

¿Aprecian grandes diferencias entre le trato que se le da a la música en otros países y el que se le ofrece en España?

A. M.: Es complicado responder porque llevamos ya un tiempo viviendo fuera de España. Londres es una jungla porque la cantidad de grupos que hay es bestial, pero lo mismo se podría decir de Murcia, ¿no? La calidad de grupos que hay ahora mismo en España no tienen nada que envidiar al Reino Unido, y creo que eso es un indicativo…

"La prensa murciana no se había hecho eco de nuestra música, ¡ni siquiera nos habíamos apuntado a los Premios de la Música! Ojalá ahora nos tengan en cuenta"

Porque..., musicalmente, ¿de dónde vienen Alicia Macanás y Fran Parisi? ¿Tienen experiencias previas? ¿Tenían algo que ver con lo que hacen hoy en Minimal Schlager?

A. M.: Hemos tenido varios proyectos anteriores, juntos y por separado, de estilos muy variados, además de colaboraciones. Hemos lanzado cosas, pero a nivel DIY [Do it yourself, ‘Hazlo tú mismo’], y como nos hemos ido mudando a menudo, realmente este es el primer proyecto en el que llegamos al punto de hacer un disco.

En cuanto a la propuesta, todo el mundo coincide en utilizar dos etiquetas para aproximar a los lectores a la música de Minimal Schlager: ‘synth-pop’ y ‘ochentero’. ¿Se sienten cómodos con ellas?

A. M.: Las etiquetas son necesarias hoy en día, pero cuando hacemos música no estamos pensando en ellas; no son algo realmente importante para nosotros. Más bien, lo que nosotros intentamos es crear una etiqueta propia, que la gente escuche nuestra música y diga: «Esto suena a Minimal Schlager», y creo que lo hemos conseguido.

También se dice que, pese a esas atmósferas de sintetizadores tan características de los ochenta, Minimal Schlager suena fresco. ¿Cuál es el truco?

F. P.: Creo que el sonido en sí no es tan distante del de algunas otras propuestas…, al fin y al cabo, Minimal Schlager no deja de ser un proyecto pop. Pero sí que creo que nuestra puesta en escena y elementos visuales tienen una pizca de experimentación y atrevimiento que impactan en el primer contacto.

Aunque las mejores referencias o comparaciones que podamos encontrar para explicar cómo suena Minimal Schlager son extranjeras, el disco se abre con la Nana del caballo grande, de Lorca. ¿Cuál era vuestra intención haciendo esta adaptación y, además, colocándola como el primer track del álbum?

A. M.: La idea surgió cuando Francisco estaba leyendo Bodas de sangre. Entonces pensó en que hiciéramos un disco conceptual. Así que en noviembre de 2021 hicimos una residencia de tres semanas en un centro artístico cerca de Dresde (Alemania) en el que estábamos prácticamente solos por la noche, y de ahí salió casi todo el disco. 

Y en la actualidad siguen presentándolo en directo –tengo entendido que, incluso, con un batería, para darle empaque al espectáculo–, pero... ¿cuáles son los planes para 2023? ¿Trabajan en nuevos proyectos o van a seguir centrados en dar conciertos?

F. P.: Estamos puliendo los flecos de una compilación que hemos preparado con remixes, rarezas y alguna que otra canción nueva. Y, de paso, sí, seguir tocando y grabando.

¿Un deseo para este año que recién comienza?

A. M.: Más apoyo a las salas de conciertos, ¡sin ellas no sería posible desarrollar proyectos así!