Carlos Sadness (Barcelona, 1987) se ha convertido en uno de los principales de la escena indie española. Con sus temas bailables y con ritmo, el músico catalán habla de 'Tropical Jesus', su último álbum nacido el año pasado en mitad de la pandemia. Su último sencillo, 'La costa breve', ya aglutina miles de visitas en Youtube y escuchas en plataformas digitales.

¿Cómo lleva esta nueva normalidad de los conciertos? ¿Echa tanto de menos como su público que no puedan bailar?

Lo echo de menos, pero por un lado me he acostumbrado y le veo mucho encanto también a estos conciertos. Creo que son un milagro, ahora empieza a haber conciertos así en México y mis amigos de allí me dicen que somos muy afortunados por no haber dejado de tocar tanto tiempo como ellos. Así que claro, esto es muchísimo mejor que nada.

'Tropical Jesus' ha sido un disco lanzado en este momento tan raro pero que le está trayendo muchas alegrías.

A pesar de no tener una gira festivalera como quizás merecía este disco, estoy visitando muchas localidades y las cifras en Spotify son buenísimas para mí. Ronda los 80 millones de escuchas antes de su cumpleaños; el anterior, con cuatro años, ha alcanzado los 100. Al final son solo cifras, pero en un momento como este en el que no hay tanto feedback con el público cara a cara, son un consuelo y un soplo de ánimo para mí.

Es un disco en el que destacan las numerosas colaboraciones con otros artistas. ¿Continúa trabajando en esa línea de cara a próximos trabajos?

Me han pedido muchísimas colaboraciones desde el principio de la pandemia. Empecé con un sí a todo y ahora estoy en el lado contrario, creo que me pasé, me cuesta mucho decir que no, y tengo que decirlo a propuestas que son muy buenas, pero es que no puedo sacar una canción cada mes. Estoy en un momento en el que necesito respirar, escribiendo poquito, ordenando la vida, para que todo venga.

Siempre ha sido muy activo en las redes sociales e incluso en los últimos tiempos se han atrevido a ir mostrando adelantos de sus nuevos temas a través de sus perfiles. ¿Es la fórmula que ha elegido para ir testeando el trabajo que va realizando ante su público?

Pocas veces anticipo cosas, pero esta vez me apetecía hacerles un poco partícipes, vengo de muchas colaboraciones y quiero señalar la próxima canción como algo mucho más propio y personal, es una forma de hacerlo.

De hecho, 'Tropical Jesus' es un disco que fue desgranando poco a poco con el lanzamiento de diferentes singles. ¿Cree que ese es el futuro, más allá del lanzamiento de trabajos completos?

Ojalá no se pierdan los discos largos, pero estamos muy alocados con el tema de los singles, a mí no me acaba de encantar que una canción sola tenga tanta responsabilidad porque a veces hay que entender una canción dentro de un conjunto. Pero por otro lado es una herramienta fantástica para alimentar la sed de contenido de la gente.

Con este nuevo disco, más que nunca, ha mostrado su faceta de dibujante regalando a su público postales de cada una de las canciones. ¿No concibe la música sin eso otra faceta plástica?

De momento no, siempre va de la mano, desde que empecé. Me lo paso bien y me sale solo.