El escultor Anthony Caro, considerado uno de los mejores artistas británicos de esta disciplina de su generación, falleció el miércoles de un ataque al corazón a los 89 años de edad, confirmó este jueves su familia en un comunicado.

Caro trabajó como asistente del también escultor Henry Moore entre 1951 y 1953, época en la que descubrió el arte moderno y empezó a desarrollar sus primeras obras de estilo abstracto.

Tras un viaje a Estados Unidos en los años 60, su obra se orientó hacia las esculturas hechas con soldaduras y piezas metálicas y normalmente pintadas con colores vivos.

Caro, que fue alumno del Christ's College de la Universidad de Cambridge, recibió varios premios y reconocimientos a su obra.

El más importante fue el premio Jack Goldhill de escultura en 2008, entregado por la Real Academia de las Artes británica y dotado con 10.000 libras.

Se le entregó el galardón por su escultura Promenade, expuesta en la actualidad en el parque de esculturas de Yorkshire en Wakefield (noroeste de Inglaterra), y calificada de "pieza excepcional" por el jurado del certamen.

El escultor, que se había comprometido a seguir trabajando hasta cumplir los 100 años, presentó el pasado mes de junio una exposición con algunas de sus esculturas en la galería Gagosian de Londres.