El 44 por ciento de los titulados superiores españoles de edades comprendidas entre 25 y 29 años ocupan puestos de trabajo de cualificación inferior a sus estudios, frente a la media del 23 por ciento de los países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), según datos del informe «Panorama de la Educación 2010», publicado ayer con datos del curso 2007-2008.

La secretaria de Estado de Educación y Formación Profesional, Eva Almunia, relacionó el dato español con la «debilidad» que supone la falta de titulados de FP de grado medio, sobre todo para empleos de nuevas profesiones, que tienden a desempeñar los universitarios.

En 2008, el 80,8 por ciento de los jóvenes de 15 a 19 años estudiaban enseñanzas postobligatorias (Bachillerato o FP) en España, una tasa muy próxima al 81,6 por ciento de media de la OCDE y más alejado del 84,9 por ciento de la UE de 19 países miembros. Menos favorables son los datos globales. Según el informe, un 22 por ciento de los ciudadanos españoles ha completado la Educación Secundaria Postobligatoria, frente al 44 por ciento de la OCDE y el 47 por ciento de la UE. El estudio apunta que, pese a los avances registrados en España en los últimos años (9 puntos desde 1998 y 3 desde 2004) las diferencias con el resto de países son todavía «notables».

Los que se titularon en 2008 en FP de grado medio a la edad habitual de graduación (17-18 años) fueron un 38 por ciento en España, 14 puntos por debajo de la media de los 19 países de la UE y 6 menos que la media de la OCDE, según el documento elaborado por esta organización. Además, el 43,8 por ciento de todos los matriculados en España en Secundaria Postobligatoria estaban cursando FP (4 décimas más que 2007), en comparación con un 47,4 por ciento en la OCDE y 52,9 por ciento en la UE.

En el mencionado año, el 39 por ciento de los españoles de entre 25 y 34 años eran titulados superiores (universitarios o de FP superior), por encima de la OCDE (35 por ciento) y de la UE (34 por ciento). Sin embargo, la tasa de ingreso universitario cayó del 47 al 41 por ciento desde 2008 en España y aumentó la de ciclos formativos superiores del 15 al 22 por ciento.

De lo dicho no debe inferirse que a mayor cualificación, mayor riesgo de sufrir desempleo. El informe precisa que tanto en España, como en la OCDE y en la UE, la tasa de paro disminuye a medida que aumenta el nivel educativo, y lo hace con mayor intensidad en el caso de las mujeres. En 2008 se apreció, con relación al año anterior, que en España el aumento del desempleo creció más en el colectivo que solamente tenía estudios obligatorios, sobre todo entre los varones.

En Castilla y León, de los cerca de 4.000 alumnos nuevos que se incorporarán a las aulaseste próximo curso 2010-2011, la mayor parte, 2.975, lo harán a las enseñanzas de Formación Profesional, es decir, casi tres de cada cuatro. Estas enseñanzas, junto con la Infantil y Primaria incrementan el número de alumnos, mientras que la ESO, el Bachillerato y la Educación Especial pierden matriculados este curso. Así lo señaló el consejero de Educación, Juan José Mateos, durante la presentación del próximo curso que arranca el jueves en Infantil y Primaria.

Otra conclusión del estudio de la OCDE hace referencia al aprendizaje de lenguas extranjeras. El informe indica que el tiempo que se dedica a otros idiomas en los primeros cursos de la ESO representa un 10 por ciento de todo el horario escolar, inferior al 13 por ciento que abarca en los últimos niveles de Primaria, al contrario de lo que ocurre en el conjunto de los países de la OCDE y de la UE.

El documento concreta que los alumnos españoles de entre 9 y 11 años emplean un 13 por ciento de todas las clases en aprender uno o dos idiomas extranjeros, según los casos, frente al 8 por ciento del conjunto de la OCDE y el 10 por ciento de media de los 19 países de la Unión Europea.

Por el contrario, entre los estudiantes de 12 y 14 años, la carga lectiva de los idiomas baja al 10 por ciento en España, y sube al 13 por ciento en la OCDE y al 14 por ciento en la UE. El peso de las materias instrumentales (Lengua y Matemáticas) se reduce en los tres casos de forma similar.