La cantidad de moneda en circulación se disparó el año pasado a un ritmo nunca visto desde la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos y, en medio de una afluencia masiva de efectivo de las autoridades fiscales y monetarias, la moneda total en circulación se disparó a 2,07 billones de dólares a finales de año, según datos de la Reserva Federal de EEUU.

Esto supone un aumento del 11,6% con respecto al año anterior y fue el mayor incremento porcentual de un año desde 1945, cuando la nación estaba saliendo de la guerra y el complejo militar-industrial se afianzó.

El experto financiero de la CNBC, Jeff Cox, apunta como causas a la ley de estímulo de 2,2 billones aprobada por el Gobierno de ese país en mayo, si bien la alta demanda de bancos extranjeros también contribuyó a este crecimiento y a la necesidad de la población de aumentar la disponibilidad de efectivo en tiempos de incertidumbre.

Los tiempos de peligro económico han coincidido históricamente con aumentos de la moneda en circulación. Por el contrario, cuando todo ese efectivo se acumula, tiende a buscar un lugar adonde ir, lo que lleva a tiempos de auge económico, apunta Cox.

De hecho, esta es una dinámica general y en Europa en 2020 también se marcaron récords. Según el Banco Central Europeo, entre el 13 de marzo y el 10 de abril el valor del dinero en circulación aumentó en 46.689 millones de euros en toda Europa, y cerca de los 5.000 millones de euros corresponderían a España, un 10% aproximadamente.

España

En España, incluso con la crisis del coronavirus de por medio y el correspondiente confinamiento, los ciudadanos siguen usando más las monedas y billetes que cualquier otra forma para comprar.

De hecho, se sitúa como uno de los países de la zona donde el 'cash' es prioritario, ya que un 83% de las transacciones se realizan con monedas o billetes, según el último informe del Banco Central Europeo (BCE).