La Guardia Civil intensificará la vigilancia sobre incendios ante un verano "desfavorable" en Zamora

El Servicio Especial de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil intensificará este verano la vigilancia en las zonas de alto riesgo, como la Alta Sanabria, ante la previsión de condiciones climáticas "desfavorables". Así lo señaló la capitán de Uprona de la Comandancia de Zamora, María Isabel García Núñez, acompañada de miembros de Seprona de Zamora y el nuevo capitán de la demarcación de Sanabria, José Luis Casas, incorporado recientemente.

Alcaldes de los municipios de Lubián, Hermisende, Porto y Pías y vecinos de la Alta Sanabria participaron este miércoles en la primera de las reuniones informativas de la Guardia Civil de prevención de incendios en la comarca. En materia de incendios, sobre el último incendio de cerca de 400 hectáreas de Calabor "hay dos personas imputadas". Este verano se reforzará el servicio de Uprona con 4 efectivos de otras zonas, control satélite Copernicus y otras medidas de vigilancia.

La capitán García subrayó a lo largo de su exposición la "coordinación", la "colaboración ciudadana" y la "concienciación" tanto en la prevención de incendios como en diferentes aspectos de competencia de Seprona, entre ellas el control de "de perros mastines" que "también preocupa por el número de denuncias".

Las condiciones climáticas para este verano de 2025 "se prevén malas. Ha llovido mucho y la vegetación se seca". Los incendios que serán difíciles de controlar, calificados de Seta generación y similares al ocurrido en 2022 en la Sierra de la Culebra, que arrasó 60.000 hectáreas "son cíclicos y tienen una rotación temporal".

La mayoría de los incendios, según datos e investigaciones de la propia Guardia Civil, son por la acción humana, bien por negligencias, accidentes o intencionados. Incendios que podían ser controlables hace 15 o 20 años ahora son incontrolables "porque las condiciones del monte han cambiado". En cuanto a la cultura del fuego como herramienta "está cambiando".

Las investigaciones de la Guardia Civil son exhaustivas, así en 2024, se registraron 15 incendios en Alta Sanabria, 10 personas investigadas, el 90% eran hombres, todos españoles de la zona "porque no vienen a prender de otros sitios", y aunque se puede determinar el origen, la intencionalidad y los motivos "son difíciles de investigar porque son indiciarios". Prácticamente la mayoría de los fuegos son provocados por personas en edad activa desde 20 a más de 60 años.

Reitero que comparado el rango de población de estos municipios con el número de incendios "esta zona es de las más peligrosas". Desde hace tres años "llevamos implantando desde Seprona, el equipo LUME" con alta presencia en Sanabria.

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García señaló además de los incendios provocados, aquellos que son por climáticas, tendidos eléctricos, accidentes. Profundizó en la normativa respecto a las solicitudes y desarrollo de quemas controladas, uso de maquinaria, quema de rastrojos, gestión de residuos y mantenimiento de puntos limpios, por parte de los Ayuntamientos, muy limitados económicamente.

A los Ayuntamientos les recordó la obligación de disponer de sus Planes de Emergencia Municipales, donde se recoge entre otras cosas, los puntos de reunión de la población, el inventario de medios disponibles en caso de emergencia, y una cierta información sobre personas que tengan algún tipo de dependencia, enfermedad o necesidades sanitarias.

Estos aspectos facilitan la labor de la Guardia Civil, en caso de necesidad de evacuación. Los incendios de 2022 dieron mucha información en la actuación, así ante nuevos grandes incendios "en lugar de desaloja se optará por confinar si las condiciones de incendio lo permiten". En los incendios de 2022 la población evacuada era gente mayor, con patologías y limitaciones que no querían dejar sus casas.

Recordó además que el periodo de alto riesgo de incendios se adelantado al 12 de junio y se prolongará hasta el 31 de octubre.

Los alcaldes señalaron muchas carencias, en especial una estación de bomberos que pueda desplazarse con inmediatez a un incendio en la zona urbana. La adquisición de maquinaria pero adaptada a la zona o el arreglo de caminos.

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