La Alta Sanabria concentra el mayor número de incendios por la caza

Los incendios relacionados con actividades cinegéticas han descendido a lo largo de la última década en la provincia de Zamora, si bien los términos municipales con mayor siniestralidad derivada de la caza son Hermisende con 10 incendios, Lubián con 7 y Rabanales con 4 incendios forestales en el periodo 2014-2023.

Año histórico de incendios forestales en Zamora, pero con alta intencionalidad

Así se desprende del análisis realizado por la Junta de Castilla y León en el contexto del Plan anual de prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales 2025 que, sin alejarse de la esencia actual, introduce novedades para adaptarse a los nuevos retos que están suponiendo los incendios forestales. Un plan que se inspira en los principios y objetivos establecidos en las "Orientaciones estratégicas para la gestión de incendios forestales en España" e integra sus líneas de acción prioritaria.

En el mismo se estudian los incendios a lo largo de la última década cuyo origen puede estar relacionado con las actividades cinegéticas, analizando en qué términos municipales se detecta con más frecuencia esta circunstancia, o en qué tipo de terrenos cinegéticos. Para ello se seleccionan los puntos de inicio relacionados con este tipo de actividad con el fin de detectar zonas de elevada incidencia que puedan necesitar actuaciones específicas a este respecto.

También se estudian los cotos con mayor número de incendios y mayor superficie quemada en el periodo. En estas áreas de actuación singularizada constituidas por cotos de mayor incidencia, se tratan de identificar los motivos por los que la siniestralidad de incendios es mayor, con el fin de aportar medidas específicas enfocadas a la raíz de los problemas.

Aunque Zamora y León son las provincias con mayor problemática en cuanto a incendios por causa cinegética, el estudio de la Junta destaca que en Zamora la incidencia es "menos acusada".

La tendencia del último decenio en cuanto a incendios relacionados con la actividad cinegética es a la baja en cuanto a número de incendios y superficie quemada. "Entre 2015 y 2018 existe un número de incendios y superficie quemada significativa, a partir de 2019 se observa una tendencia descendente bastante acusada en cuanto al número de incendios cinegéticos anuales y su superficie quemada" precisa el informe contenido en el Plan anual de prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales 2025.

Teniendo esto en cuenta, la mayor concentración de incendios con causa cinegética se da en el noroeste de la provincia. Concretamente, el coto de caza del término municipal de Hermisende denominado "Rebordillos", es el que mayor número de incendios ha tenido en el periodo 2014-2023, con un total de 10 episodios. Le sigue con 4 incendios el coto situado en el término municipal de San Justo, llamado "Sierra de San Ciprián" y con 3 incendios el coto "Valle de Lubián" en el municipio de Lubián.

En cuanto a los cotos con mayor superficie quemada en el periodo de estudio, las comarcas de Puebla de Sanabria y Galende son las más afectadas por este tipo de incendios dentro de la provincia de Zamora, son las que más se repiten en la lista de cotos con un número mayor o igual a 3 incendios y también en la lista de cotos con mayor superficie quemada.

El análisis de la Junta destaca cómo, al igual que los incendios por pastos, los episodios por causa cinegética han experimentado un descenso acusado. "No obstante, la experiencia nos dice que los incendios más graves sufridos históricamente relacionados con la caza son los originados por “conflictos cinegéticos” entre cotos o en el seno de los cotos, nacidos en venganzas que buscan provocar el mayor daño posible en la superficie forestal cinegética, por lo que se pondrán en marcha los mecanismos para priorizar la detección e investigación de este tipo de conflictos, susceptibles de generar graves incendios y para prevenirlos adoptando medidas que traten de evitar que se produzcan, contando para ello con la colaboración del cuerpo del Seprona de la Guardia Civil y el Ministerio Fiscal".

El Plan anual de prevención, vigilancia y extinción de incendios forestales 2025 propone una serie de medidas para aminorar el impacto de los fuegos relacionados con la actividad cinegética.

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Por un lado, acotar los aprovechamientos cinegéticos en los terrenos que hayan sido afectados por un incendio de acuerdo con la normativa vigente en la materia, mantener un sistema de seguimiento sobre su cumplimiento y efectuar las comunicaciones oportunas al organismo competente en materia cinegética.

Si procede aplicar medidas correctivas, disuasorias, pecuniarias y de control de la legalidad y efectuar un seguimiento plurianual de dicha aplicación, especialmente en áreas de reiteración o solape.

Priorizar estas zonas para la investigación de las causas de los incendios forestales, de tal manera que se pueda definir la problemática lo más preciso posible, para cada una de las zonas del territorio de Castilla y León en la que se producen este tipo de incendios.

Realizar labores de extensión forestal entre los colectivos implicados, para tratar de comprender mejor las necesidades de cada colectivo y la problemática real en la zona. Establecer un protocolo operativo para la eventual reclamación de daños y perjuicios y costes de extinción. Y por último, un seguimiento de los casos abierto en cualquiera de las vías en caso de reclamación: administrativa, civil y penal, dando publicidad de los casos resueltos positivamente para terminar con la sensación de impunidad que muchas veces tiene la sociedad en el caso de los incendios forestales.

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