La Feria de la Bolha Dulce de Miranda cautiva a zamoranos y trasmontanos

Miranda do Douro ha logrado situarse por méritos propios durante la Semana Santa como la capital agroalimentaria, de la cultura, el folclore y la música moderna de “La Raya” de España y Portugal gracias a una Feria de la Bolha Dulce y de los Productos de la Tierra que durante tres intensas jornadas, de doce horas, logró atraer la atención de zamoranos y portugueses de la región de Tras os Montes y Alto Douro que quedaron prendados tanto por la acogida de los mirandeses como por sus innumerables manjares ofrecidos.

Los ancestrales Pauliteiros de Miranda do Douro, reconocidos recientemente como Patrimonio Cultural Inmaterial de Portugal, se han convertido en una de las señas de identidad del Concelho y de sus 13 freguesías, y allí estuvieron mostrando su grandeza, tanto a nivel de danzas guerreras como en vestimenta, entre otros los grupos llegados desde Malhadas, Sendim, Mirandanças, Prado Gatao, Palaçoulo, Duas Igrejas, Póvoa, Picote y Sao Martinho de Angueira. Un atractivo que cada fin de semana se encuentran los vecinos y turistas por las calles de Miranda do Douro.

Tanto la organización como la participación rozaron la excelencia, cuidando hasta el más mínimo detalle, aunando calidad y cantidad, para hacerse merecedores de la Matrícula de Honor. Alrededor de 100 expositores de productores y artesanos con un espectacular y cuidado montaje que atraía y casi obligaba a disfrutar con los cinco sentidos.

Ante tanto manjar, imposible pasar de largo sin degustar alguna de tantas exquisiteces y comprarlas para llevárselas a casa: dulces, quesos, miel, jamones, licores, vinos y embutidos, destacando el folar de carne; aparte de los preparados de los chefs Marcelo Días y Lidia Bras.

Los Pauliteiros de Miranda do Douro, declarados Patrimonio Cultural Inmaterial

Miranda do Douro se ha ganado el corazón de los zamoranos y durante los 365 días del año allí se habla portugués, mirandeses y castellano, la ciudad portuguesa preferida por los de la capital, como por los alistanos y sayagués para irse de fin de semana a pasear por sus calles, degustar la mejor gastronomía en sus restaurantes o comprar en sus comercios.

La Cámara Municipal del Concelho, presidida por Helena Barril, tiene las ideas muy claras y está trabajando estratégicamente para convertir en un referente internacional a nivel turístico, cultural, gastronómico y comercial a Miranda do Douro. Su lema no deja lugar a dudas siendo claro y conciso: “Miranda do Douro te espera con el corazón abierto, con el encanto de sus gentes, la belleza de sus tradiciones y el alma de un territorio único donde la tradición vive”.

La próxima gran cita para zamoranos y trasmontanos la tendremos el ya próximo día 27 de abril, domingo siguiente a San Marcos, con la celebración de la romería internacional en honor a Nuestra Señora la Virgen de la Luz en Constantim, aldea colindante con Moveros de Aliste, la madre de todas las fiestas romeras hispano lusas y primera de las “Siete Hermanas” de España y Portugal.

Los actos de vísperas comenzarán el sábado, día 26, a las 16 horas con la subida en procesión de la Virgen de la Luz desde la iglesia matriz de Constantim hasta la ermita rayana donde ya pasará la noche bajo la salvaguarda de la GNR (Guarda Nacional republicana). Por la noche baile con Borguinha de Braga y Liliana Oliveira. El domingo 27, la ermita abrirá sus puertas desde primeras horas de la mañana a los devotos de España y Portugal. A las12 pasacalles con la Banda Filarmónica de Miranda do Douro y a las 14 horas misa y procesión. Por la noche actuará la Banda 4 en el recinto Sao Joao dos Mozos. Durante todo el día mercado internacional.

En Miranda do Douro del 16 al 18 de mayo tendrá lugar en el Castillo la recreación histórica de la Guerra del Mirandum. Se conmemora el 263 aniversario de la destrucción del Castillo de Miranda do Douro (8 de mayo de 1762). En esta histórica recreación el Conde Lipes y el Conde Aranda chocan, reviviendo los heroismos y muertes de la Guerra del Mirandum a través de una atmósfera barroca y un mercado polar de la época (siglo XVIII).

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