Fallece Miguel Morán, el "cura bueno" de la Tierra de Campos
Luto por la muerte del párroco de Prado, Quintanilla del Olmo, Villamayor de Campos, Villar de Fallaves y Castroverde de Campos: un hombre muy querido

Miguel Moral, en una celebración. / LOZ
Ha fallecido el sacerdote Miguel Morán García, quien fuera párroco de Prado, Quintanilla del Olmo, Villamayor de Campos, Villar de Fallaves y Castroverde de Campos. En Prado y Quintanilla del Olmo era una institución con sus más de 57 años como responsable parroquial. En los otros 3 pueblos más de 10 años.
Nació en Carbajales de Alba, el 17 de marzo de 1939, a donde regresaba cada 8 de septiembre para concelebrar la Virgen de Árboles, patrona de la villa carbajalina.
Miguel Morán se ordenó sacerdote el 3 de abril de 1965, en la Catedral de Zamora y celebró el Cantamisa el 19 de ese mismo mes, en Carbajales de Alba. Este año cumpliría 60 años de entrega religiosa.

Miguel Morán durante el homenaje de los vecinos de Quintanilla y Olmo / Cedida
Fue destinado, en primer lugar, como párroco, a la parroquia san Juan Bautista de Samir de los Caños. A los dos años se trasladaría a las parroquias de Santa Marina de Prado y San Babilés de Quintanilla del Olmo, donde ha permanecido hasta ahora.
Miguel Morán García practicó la docencia en Villalpando, enseñando Latín e impartiendo la religión católica, a los niños en el colegio y a los adolescentes en el instituto.
Hace más de diez años también ha llevado las parroquias de Villamayor de Campos, Villar de Fallaves y Castroverde de Campos. Ha sido un sacerdote muy conocido y apreciado en todos los pueblos del Voto de la Inmaculada.
De carácter muy sencillo y asequible a todos, pronto se ganó el cariño de los parroquianos y de sus propios compañeros sacerdotes. Por eso la celebración de las bodas de oro sacerdotales fue toda una fiesta.
Una decena de curas de la zona de Tierra de Campos se sumaron al homenaje tributado a su compañero Miguel Morán García, donde no faltó el entonces obispo de Zamora, Gregorio Martínez Sacristán, y numerosos vecinos de ambos pueblos que han querido así arropar a su cura, don Miguel.
Una placa en el pueblo de Prado inmortaliza este momento. “A D. Miguel Morán García en sus bodas de oro sacerdotales” se puede leer en el reconocimiento del Ayuntamiento a su párroco. Un homenaje en el que también estuvo muy presente el vecino pueblo de Quintanilla del Olmo y hasta repicaron las campanas en ambos pueblos.
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