La tradición de la Loya y el Ramo vuelve a Sanabria

La Virgen de Gracias sale en procesión por las calles de Vigo de Sanabria

Vigo de Sanabria festejó su día grande con la conmemoración de su patrona, la Virgen de Gracias, ensalzada con la tradición de la Loya y el Ramo. Los actos centrales comenzaban en el templo parroquial de San Miguel para el traslado en procesión de la imagen de la Virgen del Rosario hasta la ermita de la Virgen de Gracias, en un largo recorrido por el valle del Forcadura.

Una comitiva que abrían los pendones, la cruz parroquial y el gaitero de Vigo, Tirso Espada precediendo a la imagen de la virgen. Sin la temida lluvia se pudo completar el recorrido de templo a templo.

Los miembros de la Comisión de Fiestas se fueron turnando en portar el cetro de mayordomía a lo largo de todo el trayecto. La misa fue concelebrada por Luis Zurrón Rodríguez, Miguel Ángel Fernández Orduña y el párroco de Tierra de Campos Agapito Gómez García.

Las jóvenes encargadas de cantar el Ramo desde la entrada de la ermita hasta el altar fueron María Espada, María Zurrón, Natalia Gallego, Diana Espada y Naroa García, entraron en el templo recitando las alabanzas a la Virgen que se han trasmitido de generación en generación. José Francisco Cortes, recitó la Loya con su voz radiofónica y alma mater de Radio Vigo. “En casa de mis abuelos y, cerquita de la ermita, la radio puse en marcha para alegrar muchas vidas”.

Una voz que en un día como el de ayer, y con la solemnidad y devoción a la virgen, alegró a todos los vecinos. La Loya se convertía en un repaso desde la infancia a la adolescencia y esa radio vecinal de “Paco el de la radio” que su gente en los corrales esperaba a que la encendiese con cierta ansia y alegría de “bonitas canciones y disfrutar de tu compañía”. 

Las fuerzas del día a día eran de la Virgen y las canciones populares como el pasodoble a Zamora de un leonés Roberto Rey. Maruja de “tí” Paula, su madre, siempre devota de Gracias y siempre con Vigo en su boca y en sus canciones, y de ellas su preferida “La Molinera”. Y con la radio por pasión con el apellido de Vigo, Paco “el de la radio” dedicó sus dos vivas a la Virgen y al pueblo. 

Suscríbete para seguir leyendo