Los santos salen a hombros en Bercianos de Aliste

Bercianos de Aliste ha rememorado este domingo las costumbres religiosas comunitarias y consuetudinarias de la histórica cofradía de San Cosme y San Damián, que ya regía la vida y los destinos del pueblo hace al menos 405 años, pues un ya lejano día 26 de octubre de 1616 le concedía los hermanos y hermanas la Bula de Indulgencias Plenarias en Roma el Sumo Pontífice Paulo V.

La mayordomía de San Cosme y San Damián se reparte en dos semestres: en 2023 el primero fue mayordomo José Gallego Blanco (hijo del histórico sastre de las Capas Pardas, Juan Gallego Baz) y su esposa Rosa. Fueron los encargados de montar el Monumento (del Santísimo) de la Semana Santa. El segundo semestre es mayordomo Emiliano Rapado Fernández. La mayordomía incluye el decoro y atención de la iglesia de San Mamés.

El sábado se celebraron las vísperas, donde los vecinos y vecinas participaron en un concejo comunitario para, a prestación personal, limpiar y adecentar el entorno urbano del pueblo y caminos. Con la satisfacción del trabajo bien hecho llegó la hora de reponer fuerzas en la casa concejo. Los comensales disfrutaron de un variado menú donde no faltaron el tradicional y sabroso hornazo típico alistano y los callos.

San Mamés es el patrono de la parroquia, sin embargo, los patronos del pueblo son San Cosme y San Damián cuya festividad tiene lugar el 26 de septiembre: este año por circunstancias hubo de retrasarse al 22 de octubre ya en pleno otoño.

Devoción eterna entre los feligreses y feligresas a los patronos de los cirujanos. Pedro Santiago, un abuelo y devoto, –que tras sufrir un grave accidente se recuperó y primero cumplió su deseo de procesionar en La Carrera de Jueves Santo y en el Santo Entierro de Viernes Santo–, ayer cumplió otra de sus promesas, subió hasta lo alto de la torre y fue el encargado de repicar las campanas para llamar a todos sus paisanos a los oficios religiosos del gran día.

Acto seguido tenía lugar la santa misa oficiada por el cura Kizito de Nigeria que tomaba su primer contacto con los cofrades de la Hermandad Penitencia del Santo Entierro de Bercianos descubriendo la procesión más peculiar y parece ser que única en el mundo cristiano. Y es que los mártires, Cosme y Damián, procesionaron, como llevan haciéndolo cuatro siglos, pero no en andas (carro), sino en brazos de sus devotos, Pedro Blanco y David Santiago, como dos niños recién nacidos. La hachas (velones) los portaron el alcalde Fernando González y el concejal Juan Pablo Blanco.

El Papa Paulo V otorgó en Roma el día 26 de octubre de 1618 la Santa Bula a la cofradía de San Cosme y San Damián en la iglesia de San Mamed de Bercianos de Aliste «salud y bendición apostólica».

Una cofradía que admitía a laicos de ambos sexos y fue erigida en el lugar de Bercianos en la Vicaría de Aliste de la Provincia Eclesiástica de Santiago de Compostela. Paulo V concedía a los cofrades las indulgencias plenarias, es decir, la remisión de todos sus pecados, «cuando confesados y comulgados visiten la iglesia donde está ubicada la cofradía, cada año, desde las primeras vísperas hasta la metida del sol».

Concedía las indulgencias parciales a quienes (no cofrades) hiciesen lo propio en las festividades del Lunes de Pascua de Resurrección, San Esteban Protomártir (26 de diciembre) y Purificación y Natividad de la Virgen: «Siete años y todas las cuarentenas que ganan los cofrades en el rezo de los divinos oficios y a los que acompañasen al Santísimo Sacramento cuando se lleva a los enfermos o a aquellos que por causa de enfermad no pudieran acudir a las procesión pero se unan a ellos al toque de campana poniéndose de rodillas y rezando un Ave María por el enfermo, por las almas difuntas de la cofradía o hiciesen las paces con los enemigos»

La cofradía poseía en diciembre de 1751 un rebaño, –era el más grande del pueblo–, con 17 carneros, 9 ovejas y 4 corderos «que dan de esquilmo cada año dos arrobas y media de lana» más 9 machos cabríos y una cabra. Su esquilmo anual se situaba en 114 reales y 17 maravedíes.

Para Bercianos la honra a San Cosme y San Damián inicia la cuenta atrás para la Semana Santa que en 2024 llegará recién iniciada la primavera en marzo: el día 28 será Jueves Santo (La Carrera) y el 29 Viernes Santo (Santo Entierro).

Es la peculiar tradición llevada a su máxima expresión: “Bercianos: la Pasión de un Pueblo”.

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