Riofrío explicará en imágenes las consecuencias de los incendios de La Culebra
Cuatro fotógrafos mostrarán mañana sus audiovisuales captados tras la tragedia
A. B.
Un año después de los dos incendios que provocaron cuatro muertos y calcinaron miles de hectáreas de la Sierra de La Culebra, cuatro audiovisuales volverán a mostrar, a las 17:30 de mañana, sábado 19 de agosto, en Riofrío de Aliste, las secuelas de aquellos dramáticos fuegos con imágenes realizadas por varios integrantes de la Asociación Fotográfica Vallisoletana.
Se trata de Ángel Pérez, Carlos Blanco, Javier Rodríguez y Miguel Ángel Cruz que, en algún caso, transitaron por el monte solo horas después de haberse abrasado y, en otros, lo recorrieron y grabaron a lo largo del año siguiente a la catástrofe medioambiental.
Las fotografías que aparecen en estos trabajos audiovisuales dan fe, por una parte, de la destrucción que supuso la catástrofe ecológica, económica y social y, por otra, muestran paradójicamente que la vida continúa, que la regeneración está en marcha y que La Culebra necesita ayuda para recuperarse.
Para Carlos Blanco, uno de los fotógrafos participantes en este proyecto y originario de la localidad alistana de Latedo, el objetivo de esta obra escrita, grabada y montada a ocho manos, es "ayudar a que los incendios de La Sierra no caigan en el olvido. Los cuatro fotógrafos, cada uno con su mirada, recorrimos estas tierras achicharradas, documentamos gráficamente el desastre, la desolación y la impotencia que dejaron los fuegos", resume.
Otras proyecciones
Con anterioridad, los audiovisuales ya han sido proyectados en el auditorio del Centro Cívico José Luis Mosquera de Valladolid, en los llamados "jueves fotográficos", así como en la cita solidaria "La Sierra renace" que se celebró en Villanueva de Valrojo a principios del mes de junio.
En opinión de los autores, "pocas cosas abruman y sobrecogen tanto al alma humana como el paisaje ennegrecido y desolador que deja un incendio". Para este amante de la fotografía, "todo se vuelve oscuro, silencioso, sin vida aparente hasta que, de repente, un brote verde a los pies de lo que en su tiempo fue un árbol majestuoso te hace recobrar la esperanza, te dice que nada se acaba, que costará, pero que se logrará recuperar la vida perdida".
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