Suiza relaja las limitaciones a la caza de lobos ante los frecuentes ataques al ganado

El Gobierno suizo aprobó hoy medidas que relajan las limitaciones actuales a la caza de lobos en el país, ante el aumento de la población de estos predadores y sobre todo de sus ataques al ganado, especialmente en zonas de montaña.

En España, Cantabria, Asturias, Castilla y León y Galicia trasladaron en septiembre pasado al comisario europeo de Medioambiente, Virginijus Sinkevicius, su preocupación por la que consideran una incorrecta gestión estatal del lobo en sus territorios y el aumento de los ataques contra las explotaciones ganaderas.

En Suiza, a partir del 1 de julio estará permitido abatir a lobos aislados si han causado daños a seis cabezas de ganado, o a aquéllos parte de una manada si han matado o herido a ocho animales domésticos (antes el umbral en ambos casos estaba en diez animales).

No obstante, en el caso de las manadas, más protegidas por la ley, el cantón afectado debe antes presentar una demanda para que se permita esta caza, ante la Oficina Federal de Medio Ambiente.

Por otra parte, si las víctimas son animales domésticos de gran tamaño como vacas, caballos e incluso especies importadas como alpacas o llamas, el permiso para abatir a los lobos se dará ya cuando un ejemplar de este ganado muera o resulte herido (antes eran necesarios dos para dar la luz verde).

Por último, un lobo tanto aislado como integrado en una manada puede ser abatido si constituye una amenaza inmediata para una persona, según las modificaciones de la Ley de la Caza aprobadas hoy por el Consejo Federal (Ejecutivo).

En Suiza, donde estos parientes salvajes del perro estuvieron a punto de extinguirse hace un cuarto de siglo, viven actualmente unos 250 lobos, agrupados en su mayoría en unas 26 manadas, y su número va en aumento, según las autoridades del país centroeuropeo.

Junto a la reforma legal, el Gobierno ha anunciado que destinará 4 millones de francos suizos suplementarios (4,1 millones de euros) para reforzar la protección del ganado.

Comunidades rurales de Suiza aseguran que cada año entre 300 y 500 cabezas de ganado mueren a manos de estos predadores, y que estos se agrupan cada vez en manadas mayores, lo que podía poner en peligro incluso a los rebaños en tierras bajas.

En 2020 los suizos rechazaron en referéndum permitir la caza preventiva de lobos, lo que hubiera supuesto autorizar su abatimiento si éstos eran avistados demasiado cerca de una población o de explotaciones ganaderas.