Extrañas "ofrendas" revolucionan el pueblo de Cañizal

La Guardia Civil investiga la aparición de señuelos que se relacionan con la santería y la magia negra

Una de las "ofrendas", aparecida en la plaza de Cañizal

Una de las "ofrendas", aparecida en la plaza de Cañizal / Cedida

Asombro, intriga, desconcierto y hasta cierta preocupación viven estos días los vecinos de Cañizal desde la aparición de elementos que se suelen emplear en rituales de magia negra. 

Todo comenzó la madrugada del martes cuando los vecinos descubrieron, en las inmediaciones del cementerio, una suerte de “altar” en el suelo con una botella de licor medio llena y dentro una rosa roja, un plato con bombones y sal, un pintalabios, una copa, bengalas o joyas. Algún vecino ya lo vio la noche del lunes con una vela encendida. 

El hallazgo, en el cruce de la carretera N-605 con la calle del cementerio, causó cierto revuelo en este pueblo de la comarca de la comarca de La Guareña. Los comentarios e interpretaciones no se hicieron esperar, pero en principio se quedó en la anécdota. 

El caso tomó otro cariz cuando en la mañana del viernes aparecen una nueva “ofrenda” en la plaza del pueblo. También con elementos comunes como la botella y la flor, la copa con una sandalia encima, unas tijeras abiertas o un antiguo billete de cien pesetas o fruta. 

"Ofrenda" aparecida en las inmediaciones del cementerio de Cañizal

"Ofrenda" aparecida en las inmediaciones del cementerio de Cañizal / Cedida

El caso dejaba de ser anecdótico para empezar a sembrar la preocupación entre los vecinos de Cañizal. Hasta tal punto llegó el revuelo que el alcalde, Rubén Sierra, decidió comunicar los hechos a la Guardia Civil. Los agentes se personaron en el pueblo, llevándose algunos de los elementos para intentar esclarecer el caso. 

Prácticas de brujería

La vinculación de estas “ofrendas”, a las puertas de la Semana Santa, a santería, prácticas de brujería o rituales de magia negra causa preocupación. “El pueblo está revolucionado” confirma el alcalde, quien asegura que ni nadie ha visto nada ni se explican la aparición de esta especie de conjuro

Hay quien se ha apresurado a buscar rituales similares en Internet y el hallazgo se asemeja a esas posibles prácticas de brujería. Hay quien recurre a estos rituales en las noches de luna creciente y para atraer fuerzas positivas, la fortuna o el amor o alejar la mala suerte. 

De momento se mantiene el misterio y no queda nadie en el pueblo que no hable de “las cosas que han aparecido”. El deseo del alcalde, y de todos los vecinos, es que “esto se pase, no vaya más allá y se recupere la tranquilidad”.