A sus casi 90 años Ramón Tamames ha vuelto a ser el centro de conversación en las tertulias de los medios, de los bares y de las casas de toda España. También en la localidad zamorana de El Cubo de la Tierra del Vino, donde tienen una visión muy diferente de Tamames, "el nieto de don Clemente", un niño al que vieron crecer y del que aún se acuerdan con vividez los mayores del lugar.
Sí, el economista e historiador madrileño desciende de este pueblo de la Vía de la Plata, a medio camino entre Zamora y Salamanca, donde pasó los veranos de su niñez y adolescencia en casa de sus abuelos, Clemente y Lucía.
Clemente era maestro nacional, ya jubilado cuando nació su nieto Ramón, y de él adquirió el gusto por la lectura. "Aprendí a leer y a escribir con mi abuelo Clemente Tamames, que en la inercia de su profesión ocupó sus muchas horas libres dándonos las primeras letras a una decena de nietos, para lo cual utilizaba como texto principal El Quijote", escribió el propio Ramón Tamames en una reseña autobiográfica remitida a la extremeña Asociación Histórica Metellinense.
De su abuelo zamorano, además del gusto por la lectura, heredó "una sostenida admiración por el sentido de la justicia, así como una alta valoración del significado de la cultura", en palabras del candidato a la frustrada moción de censura promovida por Vox. La otra herencia que don Clemente dejó a su nieto Ramón fue un Diccionario General Etimológico de la Lengua Española, de Roque Barcia.
Cada verano, Ramón y sus hermanos llegaban en tren desde Madrid –El Cubo tuvo estación de ferrocaril hasta 1985– y, además de leer, compartían meriendas y aventuras con otros jóvenes del pueblo. "Era primo carnal de mi vecino Bernardo, que vivía enfrente de nosotros, y en ocasiones íbamos a merendar todos juntos a El Chafaril" –un bello paraje con una fuente emblemática en el pueblo–, rememora Saturnina Álvarez Mangas, una vecina de El Cubo coetánea de Tamames.
El padre de Ramón, Manuel Tamames, era cirujano, pero cuando llegaba agosto y venía a El Cubo "ayudaba a su familia en la trilla", recuerda Saturnina.
El abuelo don Clemente vivió hasta los 95 años. Tras su fallecimiento las visitas de los Tamames al pueblo se fueron espaciando cada vez más en el tiempo. Pero Ramón no perdió su vinculación con la provincia de Zamora.
En 2013, el catedrático de Estructura Económica publica la obra autobiográfica "Más que unas memorias", en cuyo primer capítulo narra un viaje por la comarca de Sayago explorando el origen de su apellido, que vincula con la localidad de Tamame, a escasos 20 kilómetros del pueblo de sus abuelos paternos.
Amigo de la periodista Carmen Ferreras, el economista ha presentado muchos de sus libros en Zamora, solía venir acompañado de la "gran hermana" Aída Nízar, que trabajaba para él
La obra continúa recordando su convivencia con personajes históricos como Pío Baroja, José Ortega y Gasset, Camilo José Cela, Nelson Mandela o Ernesto Che Guevara, y también con otros políticos con quienes compartió hemiciclo en la Transición, como Santiago Carrillo o Manuel Fraga Iribarne.
Su faceta de escritor le trajo varias veces a Zamora, pues su amistad con la periodista Carmen Ferreras le motivó a presentar muchas de sus publicaciones en el Club de LA OPINIÓN-EL CORREO DE ZAMORA. A muchas de esos actos en Zamora acudía acompañado de Aída Nízar. Antes de entrar en Gran Hermano y pasar a trabajar en los platós, la despampanante vallisoletana era la delegada de Tamames en su despacho de Valladolid.
Su última visita a Zamora fue hace tres meses, el 15 de diciembre de 2022, para participar en un acto organizado por el Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León acerca del Ingreso Mínimo Vital.
En esa charla el CES defendía simplificar los trámites para facilitar que la gente pueda acceder al Ingreso Mínimo Vital. Tamames sostuvo que esta ayuda debería tener un carácter "excepcional" y abogó por "no dejarse llevar por la lucha de ver quién da mas y quién consigue más votos".
Un argumento curioso para alguien que militó en el PCE durante varias décadas y estuvo entre los fundadores de Izquierda Unida. Pero es que hace ya más de 30 años que Tamames dio un "giro copernicano" hacia la derecha. En 1987 fue el candidato de IU a la Alcaldía del Ayuntamiento de Madrid, y gobernó en coalición con el socialista Juan Barranco hasta que en 1989 se pasó al grupo del CDS y votó a favor de la moción de censura que desalojó a la izquierda del Ayuntamiento para entregar el bastón de mando a Agustín Rodríguez Sahagún (CDS), con el apoyo de Alianza Popular.
Tras las elecciones generales de 1989, Tamames dejó el CDS y la política activa, y pasó a ser una de las voces más frecuentes en tertulias radiofónicas y televisivas.
34 años después, el nieto de don Clemente vuelve a salir en la tele, está otra vez en el Congreso de los Diputados, donde ya ocupó un escaño en tres legislaturas diferentes. Se sienta al lado de Santiago Abascal, que se esconde tras el economista nonagenario en una moción de censura que ha fracasado con 52 votos a favor, 201 votos en contra y 91 abstenciones.