Tierra de Campos, la historia se repite: ovino y regadío

El Gobierno de Franco ya creó en 1965 un programa para el estímulo económico de la comarca a través del ovino y el regadío

Dos palomares, símbolo de Tierra de Campos, junto a las Lagunas de Villafáfila, en el despoblado de Otero de Sariegos, uno de los 22 pueblos incluidos en el plan de estímulo de 1965. | José Luis Fernández

Dos palomares, símbolo de Tierra de Campos, junto a las Lagunas de Villafáfila, en el despoblado de Otero de Sariegos, uno de los 22 pueblos incluidos en el plan de estímulo de 1965. | José Luis Fernández / Alejandro Bermúdez

Durante los próximos ocho años, 189 municipios de la Tierra de Campos se beneficiarán de un plan de actuación especial de la Junta de Castilla y León para fomentar la industrialización, el crecimiento de su tejido empresarial y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.

La idea de estimular la economía de esta comarca ubicada en el corazón de la meseta no es totalmente nueva. En 1965 el Gobierno del dictador Francisco Franco ya puso en marcha un programa de inversiones específico para Tierra de Campos que, al igual que el de 2023, se apoyaba en la ganadería de ovino como uno de los motores para el crecimiento económico de la comarca.

El ámbito de actuación del plan de Franco, al igual que el nuevo, se extendía por municipios rurales de las provincias de León, Zamora, Valladolid y Palencia, es decir, por toda la comarca terracampina.

El diseño del programa arrancaba en 1960 con la creación del Consejo Económico Sindical Interprovincial de Tierra de Campos, con representantes de las cuatro provincias afectadas y la misión de estudiar la situación económica de la zona para concretar propuestas encaminadas a su transformación.

Han pasado más de 60 años, y ya en la época se hablaba de una "estructura económica y social deficiente" en la comarca de Tierra de Campos, que justificaba la creación de dicho Consejo y la aplicación de medidas específicas.

En 1961 el programa aún estaba en fase de diseño, pero se comenzó a aplicar un "plan de urgencia social" para paliar los efectos de tres años consecutivos de malas cosechas.

Plan frustrado en Riaño

Ya en 1962, el propio Francisco Franco se desplazaba a Palencia para presidir el pleno del Consejo Económico Sindical en el que se dio a conocer el "Programa para el desarrollo de Tierra de Campos".

Entre muchas otras cosas el texto proponía la construcción de un embalse en Riaño, en el curso alto del río Esla, y canales conectando los ríos Esla, Cea y Valderaduey para hacer regable toda la zona occidental de la Tierra de Campos. Para regar la zona oriental ya estaban en marcha las obras del sistema Carrión-Pisuerga.

Ganadería extensiva en Villar de Fallaves

Ganadería extensiva en Villar de Fallaves / JAVIER SAINZ

En total pretendían transformar 100.000 hectáreas de Tierra de Campos al regadío, con una inversión superior a los 6.000 millones de pesetas en obras hidráulicas y adaptación de las explotaciones agrarias hasta 1970. El plan calculaba que las obras permitirían crear 19.840 nuevos puestos de trabajo para explotar el regadío. También se hablaba de que esto permitiría el asentamiento de nuevas familias en la comarca hasta "la desaparición del flujo emigratorio", y es que los pueblos terracampinos ya habían comenzado a verse afectados por el éxodo rural. Sus jóvenes se marchaban a trabajar lejos de sus pueblos de nacimiento, un fenómeno que comenzó a mediados del siglo pasado y no ha dejado de agravarse hasta nuestros días.

Muchas de las ideas propuestas en el programa del Consejo Económico Sindical nunca llegaron a materializarse. De hecho, el embalse de Riaño no se llenó de agua hasta el 31 de diciembre de 1987, ya en democracia, y la Tierra de Campos zamorana –zona occidental de la comarca– sigue siendo eminentemente de secano.

El programa también dedicaba un capítulo a la industria, y proponía la inversión de 1.000 millones de pesetas en el desarrollo de industrias de transformación de los productos agropecuarios para crear 5.578 puestos de trabajos, que se sumarían a los casi 20.000 previstos en el sector agrícola.

Estas políticas irían acompañadas de una inversión de 213 millones de pesetas para la modernización de las comunicaciones en la comarca.

Finalmente, el 29 de septiembre de 1965 se llevaban al Boletín Oficial del Estado la mayoría de las medidas contenidas en el Consejo Económico Sindical Interprovincial de Tierra de Campos.

Problema emigratorio

"Las adversas condiciones de clima y suelo que imperan en dicha zona, la atomización de la propiedad, la escasa diversificación de las actividades productivas, la falta de ganadería, el incipiente desarrollo de la industria y de los servicios han determinado unos resultados económicos deficitarios en la mayor parte de las explotaciones agrícolas y una marcada tendencia hacia la emigración que se ha agudizado en los años del decenio mil novecientos cincuenta-sesenta y en los transcurridos de la actual década", justificaba el Gobierno de Franco en el BOE.

Lo primero que se ordenaba era acelerar las obras en el sistema Carrión-Pisuerga y comenzar la construcción del embalse de Riaño que, efectivamente, comenzaron en 1965, aunque quedarían prácticamente abandonadas hasta la década de los 80.

También se ordenaba acelerar los procesos de concentración parcelaria, y el fomento de la ganadería y la producción de piensos y forrajes, y el establecimiento de industrias para transformación y mejor aprovechamiento de los productos obtenidos por la agricultura comarcal.

Asimismo, se ordenaba la creación por el Ministerio de Educación Nacional de grupos escolares, de enseñanza primaria y de centros de enseñanza secundaria y formación profesional.

En cuanto a la política industrial, se declararon "zonas de preferente localización industrial" las localidades de Carrión de los Condes (Palencia), Medina de Rioseco (Valladolid), Sahagún (León) y Villalpando (Zamora), una por provincia.

El decreto también ordenaba a los técnicos de Obras Públicas presentar en seis meses un plan para la resolución de las necesidades más urgentes en materia de infraestructuras.

Por último, para coordinar todas las actuaciones se creaban un Patronato, una Comisión Gestora y una Gerencia. En el Patronato tendrían representación las cuatro diputaciones provinciales, y en la Comisión Gestora los distintos ministerios implicados. Según el decreto de 1965, las actuaciones se concretarían en planes bienales.

Las cifras

En el plan para el bienio 1966-1967, contenido en el propio decreto, se preveía invertir 1.015 millones de pesetas en concentraciones parcelarias, 31 millones en mejoras de praderas y fomento de forrajes, conservación de suelos e investigación. En el establecimiento de industrias, 9 millones en deshidratadoras de alfalfa, 10 millones en iniciar la construcción de una fábrica de pienso compuesto y 21 para industrias queseras. A la mejora de la ganadería, en esos dos años se presupuestaron más de 100 millones de pesetas para la adquisición de ganado, la construcción de porquerizas y establos y saneamiento de los animales.

También se preveía transferir 48 millones de pesetas a la Dirección General de Montes para reforestación, regeneración de monte bajo y mejora de pastos, 27 millones de pesetas al Servicio Nacional del Trigo para obras en silos y más de 300 millones al instituto de colonización para obras de regadío.

Del Ministerio de Obras Públicas se reflejaban 912 millones de pesetas a invertir en transformación en regadío, 307 millones para carreteras y 139 para Renfe.

Por último, el Ministerio de Educación Nacional debía destinar 23 millones a la creación de grupos escolares en la comarca y 37 a la enseñanza media y formación profesional.

200 municipios de cuatro provincias, 28 de ellos de Zamora

El plan para el desarrollo económico-social de Tierra de Campos de 1965 afectaba a 200 municipios de cuatro provincias, de los cuales solamente 28 eran de la provincia de Zamora, concretamente Bellver de los Montes, Cañizo, Castrogonzalo, Castronuevo, Castroverde de Campos, Cerecinos de Campos, Cotanes del Monte, Fuentes de Ropel, Otero de Sariegos (desaparecido), Prado, Quintanilla del Monte, Quintanilla del Olmo, Revellinos, San Agustín del Pozo, San Esteban del Molar, San Martín de Valderaduey, San Miguel del Valle, Tapióles, Valdescorriel, Vega de Villalobos, Vidayanes, Villafáfila, Villalobos, Villalpando, Villamayor de Campos, Villanueva de Campo, Villar de Fallavez y Villarín de Campos.

De los 200 municipios, solo 24 fueron seleccionados para la realización de obras de infraestructura, abastecimiento y distribución de agua, alcantarillado, pavimentación, alumbrado o construcción de centros sanitarios. Estos núcleos comarcales, en el caso de la provincia de Zamora, serían Villalpando, Villanueva del Campo, Villarrín y Belver de los Montes.

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