El corazón de Lauro Anta se paró el pasado mes de enero en Madrid. La obra del inquieto historiador y destacado medievalista permanece. Su nombre queda por siempre vinculado a Zamora y a su hermosa patria en la comarca de Sanabria, a la que siempre perteneció, en cuyas raíces más profundas investigó y pregonó en diversos foros. Si ardua y apasionada fue su obra investigadora, no menos importante es la divulgación de sus trabajos con los que situaba en el mapa de la Historia a su Sanabria.
Activo participante en las actividades culturales relacionadas con Zamora, sus compañeros y amigos rinden hoy tributo a su memoria a través de palabras, reflexiones y recuerdos. Homenaje de justicia para una estrella más en el cielo "cuajao" de Sanabria.
He aquí los artículos dedicado a su figura: el amigo, el compatriota, el medievalista:
- Lauro Anta, ante la vida y la (su) muerte. Por Manuel Mostaza.
- Sanabria siempre debería recordar a Lauro Anta. Por Juan Andrés Blanco.
- Lauro y una guitarra. Por Jaime Pividal Gallego
- Para morir es necesario vivir. Por Tere del Estal
- A propósito de Lauro Anta. Por Paco Somoza
- Siempre entre nosotros, Lauro. Por Óscar Somoza
- Gracias, querido Lauro. Por Patricia Fernández Prada