Laura, ejemplo de mujer luchadora en un pueblo de Zamora

La historia de Laura Gago es uno de los mejores exponentes que se pueden señalar este año como ejemplo de mujer trabajadora. La propietaria de "La Miel de Laura", una explotación apícola artesanal de Escober de Tábara, viene luchando desde el pasado verano por levantar de las cenizas el negocio que da de comer a su familia y que el fuego destruyó casi por completo en julio, durante el fatídico incendio de Losacio.

De las 800 colmenas de Laura, unas 500 que se encontraban repartidas en varios colmenares por el término de Escober se vieron afectadas por el incendio, de ellas 200 quedaron completamente calcinadas, y las otras 300 muy debilitadas por el humo.

"La empresa estaba ya en fase de expansión y esto supone volver varios años atrás, pero con esfuerzo e ilusión, y muchas ganas de trabajar y de seguir en el medio rural, podremos reponernos y salir adelante. Nos estamos adaptando a las nuevas circunstancias", explica la propia Laura Gago.

A los daños en sus colmenas se suma el paisaje ennegrecido de Escober. En varios kilómetros alrededor de su pueblo no volverán a crecer las flores en unos años, y por eso Laura ha tenido que repartir las colmenas supervivientes entre varios municipios de la provincia.

El impacto del incendio se ha traducido en que la producción de este último año ha sido de aproximadamente un tercio de la cantidad de miel que pudieron sacar en la anualidad anterior. Aun así, Laura y su marido trabajan igual de duro que sus abejas para volver a levantar lo que con tanto esfuerzo venían construyendo desde el año 2006. Ella fue la que puso las primeras colmenas hace ya 16 años como actividad complementaria, y más tarde ambos decidieron dedicarse a tiempo completo a la empresa, que es su único sustento.

"Los primeros días tras el incendio fueron muy duros, pensamos que tendríamos que buscar otros trabajos e irnos de Escober, pero afortunadamente vamos saliendo adelante", recuerda la apicultora.

Más de un millar de colmenas para reponer las pérdidas de los incendios

En esa fase de recuperación, reconoce, han sido claves las compensaciones por las colmenas quemadas, que ya han sido abonadas por parte de la Junta de Castilla y León, y sobre todo el alimento para abejas que Agricultura les ha venido suministrando de forma gratuita desde julio. Y es que Laura y su marido se han dedicado en cuerpo y alma estos últimos meses a ir alimentando a sus abejas y a proporcionarles todos los cuidados necesarios para que salgan adelante.

Precisamente, la delegada territorial del Gobierno autonómico, Leticia García Sánchez, se acercaba ayer a las instalaciones de "La Miel de Laura" para conocer de primera mano la historia de esta empresa con motivo del Día Internacional de la Mujer. Una visita justificada por tres razones de peso: "Primero porque es una mujer emprendedora, en segundo lugar porque es una mujer emprendedora en el mundo rural, que es más difícil, y en tercer lugar, porque esta es una explotación que sufrió gravemente en su actividad los incendios del pasado verano", en palabras de la delegada

García conoció el instrumental que Laura emplea para decantar y envasar la miel, de forma totalmente artesanal. La calidad de estas mieles de la Sierra de la Culebra ha sido reconocida a nivel internacional como una de las mejores mieles del mundo en los "London Honey Awards" de 2022, donde la miel de brezo, encina y roble de "La Miel de Laura" obtuvo un oro y su miel de menta un platino.

Por último, la delegada territorial de la Junta puso en valor la importancia de la mujer en el empresariado: "En las sociedades modernas, sobre todo a partir de la segunda mitad del siglo XX, hemos demostrado que un mayor grado de implicación de la mujer en la actividad empresarial va directamente ligado al crecimiento del Producto Interior Bruto, lo hemos visto en las dos últimas generaciones en Castilla y León y en Zamora. Yo quiero animar a todas las mujeres a que se impliquen en la actividad empresarial porque al final eso tira para adelante de un país y se está comprobando en los países más avanzados".

Apoyo constante de la Junta al emprendimiento femenino

La delegada territorial también destacó durante su visita a las instalaciones de "La Miel de Laura" el apoyo adicional que la Junta de Castilla y León ofrece a las empresas que pertenecen a mujeres en la comunidad, con una "discriminación positiva".

El campo zamorano incorpora la perspectiva de género con la PAC

De esta forma, en las ayudas a la comercialización de la miel se da un punto más en la priorización de mujeres apicultoras cuando se establecen los criterios para la concesión de la subvención.

También se puntúa de forma más favorable la incorporación de mujeres a las empresas agrarias y las inversiones que llevan aparejadas los proyectos industriales, con mejoras en los baremos que regulan las ayudas para proyectos en explotaciones agrarias.

En las ayudas complementarias a las rentas de la PAC para jóvenes agricultoras el importe de la ayuda es un 15% superior al valor medio regional que corresponda.

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En esa misma línea, la delegada resaltaba que el Servicio Público de Empleo establece importes adicionales de ayudas para favorecer la contratación indefinida de mujeres, favorecer el autoempleo de mujeres de cualquier nivel de cualificación, potenciar la conciliación de la vida laboral y familiar, contratar a mujeres que actúen como agentes de impulso rural y desarrollar cursos de mejora de la cualificación digital relacionados con herramientas tecnológicas.

Para contribuir al avance laboral de la mujer, la Junta ha anunciado incentivos de hasta 2.000 euros a las empresas que asciendan profesionalmente a las mujeres. Se trata, según señalaba Leticia García, de "un programa de medio millón de euros destinado a romper techos de cristal, reforzando así su compromiso con la igualdad".

“Las mujeres somos el 50% del talento de la sociedad y no puede perderse”

Por último, la delegada puso en valor que cada vez más mujeres optan por convertirse en emprendedoras. Ya casi la mitad de las ayudas al autoempleo concedidas por el Ecyl están destinadas a mujeres.

Además, en la última convocatoria para la concesión de ayudas para la primera instalación de jóvenes a la actividad agrícola, un sector que tradicionalmente ha tenido un predominio masculino, casi un tercio de los solicitantes fueron mujeres.

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