Agentes de la Guardia Civil han logrado acceder al difícil enclave donde se produjo el accidente que costó la vida al piloto Santiago Durán, para rescatar su cuerpo. Durante cuatro horas han avanzado a pie en medio de unas condiciones climatológicas muy difíciles, para luego trasladar el cadáver a los vehículos que se encontraban en la carretera, cerca de Porto. En el duro rescate han participado componentes del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña de Puebla de Trives (Orense), así como fuerzas del servicio aéreo de León, de la Usecic y de Seguridad Ciudadana de la Comandancia de la Benemérita en Zamora. La familia del malogrado piloto sevillano, de 36 años, casado y con dos hijos, aguardaba en Puebla de Sanabria la llegada del finado, que será trasladado, finalmente, al Instituto Anatómico Forense de la capital zamorana.

Tras dos días desaparecido, el amplio despliegue de efectivos lograba sobre las 15.30 de la tarde localizar el aparato estrellado en el alto conocido como Moncalvillo, donde aparecieron restos del fuselaje y el piloto fallecido, probablemente en el acto. El rastro se había después de que despegara con su avioneta contraincendios desde la base en Orense para dirigirse hacia Córdoba en una jornada marcada por la niebla y la lluvia.