Fermoselle celebró el día de su patrona, la Virgen de la Bandera, con una procesión que partió del santuario mariano ubicado junto al Convento de San Francisco.
tras la misa en el santuario, la imagen mariana recorrió las principales calles de la Villa de los Arribes acompañada de cientos de devotos, aunque a mitad de recorrido la procesión se vio ligeramente deslucida por una fina lluvia.
El desfile procesional concluía en el templo parroquial –iglesia de Nuestra Señora de la Asunción–, donde se celebró el último rezo de la novena en honor a la patrona.
Ya por la tarde, los devotos acompañaron de nuevo a la Virgen hasta su santuario. Con ese último desfile procesional Fermoselle cierra el ciclo veraniego de celebraciones marianas, que comenzó el pasado 15 de agosto, día de la Asunción de la Virgen María, con la bajada de la Virgen de la Bandera desde el santuario hasta la parroquia, un traslado en el que el patrón, san Agustín, va a buscar a la patrona.
Allí, en el corazón de la villa fermosellana, permaneció la Virgen de la Bandera durante todas las fiestas patronales, hasta el 31 de agosto, día en el que regresó a su santuario en el convento, dando comienzo a la Novena en honor a la Virgen, que concluía precisamente ayer con el último rezo en la iglesia parroquial.
Fermoselle ha vivido un verano muy intenso, tanto por las ganas de fiesta que tenían los vecinos después de dos veranos marcados por la pandemia, como por la gran abundancia de actos programados por el Ayuntamiento, desde el verano cultural a las fiestas de San Agustín, concluyendo con la Fiesta de la Vendimia.
