Domez de Alba, localidad perteneciente la municipio de Gallegos del Río, vivió ayer el día grande de las fiestas patronales de San Justo y Pastor con una calurosa y animada jornada que congregó a cientos de vecinos y emigrantes acompañados también de numerosos foráneos.

Tras dos largos años de pandemia, tristezas y duras ausencias la práctica totalidad de los emigrados y sus descendientes se dieron cita a orillas del río Aliste para recuperar y cultivar los lazos de convivencia y hermandad entre familiares y paisanos, hombres y mujeres, niños jóvenes y mayores., dispuestos preservar las tradiciones heredadas.

Manuel Baz. Chany Sebastián

La “Villa de Domez”, así denominada en su manuscrito más antiguo, cuenta como poco con 851 años de historia dado que fue en el año 1.171 cuando el rey Fernando II de León la concedió al monasterio cisterciense de Moreruela fundado por Ponce Giraldo de Cabrera en1.162.

En la actualidad es el pueblo con más población del municipio de Gallegos del Río, 158 habitantes, de los cuales 84 son varones y 74 mujeres. En los últimos años ha perdido 81 habitantes pues había iniciado el siglo XXI con 239 empadronados.

Tierra de buenas gentes Chany Sebastián

Las jornada de vísperas abrían los festejos con un sentido, merecido y emotivo homenaje, a las personas de la tercera edad como reconocimiento a todos esos hombres y mujeres que han dado por el pueblos su vida, aportando cada uno a su manera su granito de arena. Entre ellos a homenaje muy sentido al señor Manuel Baz Llover, nacido el día 6 de junio de 1920, al cual se le entregó una placa conmemorativa “Con el agradamiento de tus vecinos y amigos por tu bien hacer hacia todos nosotros. Muchas gracias”, que no se le pudo entregar en su día a causa de la pandemia.

El broche gastronómico llegaba con una merienda popular por cortesía del coto de caza “Guimaraes” de Domez de Alba. Se continuó con la actuación del cantante zamorano Juanra Junior y disco móvil Radiation.

Tierra de buenas gentes Chany Sebastián

Como suele ser habitual en todos los pueblos de la comarca, ayer, en Domez de Alba, el acto principal fue la misa solemne y la procesión en honor a los patronos San Justo y Pastor, oficiadas por el párroco Pedro Faúndez Mayo, a la que asistieron los feligreses ataviados con sus mejores galas. Culminados los actos religiosos tuvo lugar una convidada popular en la plaza de la Iglesia a base de limonada con aperitivo y baile.

Los juegos tradicionales fueron los protagonistas de la tarde junto con el cuenta cuentos para todas las edades y la recuperación de las antiguas comedias de corral alistanas de la mano del grupo teatral que está integrado por los vecinos de San Juan del Rebollar que pusieron en escena “La balada de los tres inocentes” de Pedro Mario Herrero. La macrodiscoteca “Nebulosa” animó la velada nocturna.

Los actos festivos continuarán hoy domingo con la santa misa por la mañana y por la tarde llegará la magia para todos con el mago Julito Rapado. A las 19.45 habrá gynkana para continuar a las 17.45 con un concierto de Soledad Luna y las 21 horas cena ofrecida por la asociación cultural “El Piélago”. A partir de la medida noche verbena fin de fiestas hasta altas horas de la madrugada a cargo de la orquesta “Malasia” de Cantabria”.

La iglesia de Domez de Alba es una de las más esbeltas de la Tierra de Alba. La antigua fue destruida en el mes de agosto de 1899 por una tormenta veraniega que no sólo dejó en ruinas al templo y numerosas casas, sino que arrasó con parte de la cosecha en plena en plena época de trilla. Ello llevó a Domez de Alba a estar cinco largos años sin iglesia parroquial, hasta que se decidió construir la actual allá por 1904. Aun así quedaría un largo trecho pues el maestro Francisco Nieto tardaría en culminar las obras y no pudo abrirse al culto hasta día el 6 de agosto de 1912. De un presupuesto teórico al principio de 4.525 pesetas la final terminaron pagando 15.770 en octubre de 1911 y 28 de junio de 1912.

La asociación cultural “El Piélago”, presidida por Mónica Llover Fernández, se ha convertido gracias a sus asociados y directivos, en el alma mater de la recuperación y el mantenimiento del patrimonio festivo, social y cultural de Domez de Alba y entre sus logros está la magnifica organización de las afamadas fiestas patronales de San Justo y Pastor cada mes de agosto.