La Nacional 122 se ha convertido en la principal conexión tranfronteriza entre el norte de Portugal y el resto de Europa, vertebrando a su paso la provincia de Zamora. El intenso tráfico internacional hace necesaria su conversión urgente en autovía desde Zamora a Quintanilha por Tierra del Pan, Alba y Aliste.

Imagen del hipermercado que se encuentran los cliente en la estación de servicio "La Chuca" en Sejas de Aliste, junto a la N-122

La Estación de Servicio “La Chuca”, situada en el punto kilométrico 528,7, en la era de Sejas de Aliste, se ha convertido por méritos propios en la “casa portuguesa” del Itinerario Europeo 82 entre Helsinki y Oporto, gracias a la idea e iniciativa de un alistano al que no le han faltado piedras en el camino para convertirse en profeta en su tierra tras regresar del éxodo rural.

Carlos Pérez Rodríguez nació el día 18 de marzo de 1949 en la casa familiar del popular “Barrio de la Fuente”, siendo él el mayor de nueve hermanos. Tiempos revueltos y complicados donde muchos eran los alistanos y poco lo que había para sobrevivir.

En una tierra donde los jóvenes y mayores se vieron obligados a emigrar tras la Guerra Civil a lugares tan dispares y lejanos como Cuba, Brasil, Venezuela y Argentina en busca del progreso, a él la vida y las necesidades le convirtieron en emigrante con solo once años: en 1961 dejó la tierra alistana camino de Cantabria, donde ingresó en el colegio de los Legionarios de Cristo de Santander. Un éxodo rural de cuatro años sin ver Alcañices.

Regresó a la Villa pero la situación en Aliste no había mejorado y su padre le dejó claro que en casa no había dinero para pagarle los estudios. Sólo tenía 15 años y el día 15 de marzo de 1963 se fue a San Sebastián a aprender de la universidad de la vida. Diez años trabajó en un almacén de coloniales.

Allá por el año 1977, con solamente 24 años, montaba su primera y exitosa empresa en Rentería (País Vasco), al frente de la cual estuvo hasta 2008.

Su sueño de niño siempre fue volver a su tierra alistana y crear su propia industria. Un sueño que se hizo realidad el 30 de junio de 1997 al poner en marcha en Sejas de Aliste el complejo “La Chuca” en un a superficie de 10.000 metros cuadrados.

Gasolinera e hipermercado, restaurante y cafetería, para conformar un sistema de negocio familar a aquellos que él conoció en Navarra y Francia. Con más de 16.000 referencias comerciales no es de extrañar que “La Chuca” sea punto obligado de parada para miles de familias. El 99% es clientela portuguesa.

Un servicio de 24 horas al día , los 365 días del año, donde repostar combustible pero también donde degustar en su restaurante desde una sabrosa chuleta de Ternera de Aliste a la brasa, el caldo verde portugués o el secreto luso,

Es “La Chuca” el establecimiento de España que más jamones vende a Portugal. En segundo lugar se sitúan los “rebozados” (caramelos): a los portugueses les encantan los de café con leche fabricados en Logroño.

Nuevos proyectos

Carlos Pérez Domínguez trabaja en nuevos proyectos transfronterizos dirigidos a la Raya de España y Portugal. Con el primero, “Hípica de Aliste”, el objetivo es desarrollar rutas ecuestres que permitan disfrutar a caballo compartiendo los paisajes y valores de la comarca de Aliste y de la vecina región de Tras Os Montes y Alto Douro.

Es alcañizano y nunca se olvida de su Alcañices natal donde ya trabaja en la reconversión del antiguo solar que durante décadas acogió al Bar Central para reconvertido en “Posada Real”, en plena Plaza Mayor, con cafetería en la planta baja, restaurante en la segunda y hospedaje con una suite nupcial en la segunda.

De momento en la aldea de Riofrío (concelho de Braganza) ya funciona la planta de recogida de castañas que en el otoño de 2021 se convirtió en la principal comercializadora del sabroso producto de los castaños.

Muchos españoles y portugueses, alistanos y trasmontanos tienen un lugar donde hacer parada para repostar combustible, comer o a hacer su compras en la estación de servicio “La Chuca” en Sejas.