Ya no basta con tener a la vista la cartera o el bolso mientras haces la compra. Los cacos ahora esperan a la salida de los clientes cuando llega el momento de meter la compra en el maletero del coche. Una tarea que requiere, obviamente, dejar abierto el automóvil y ocupa la atención del comprador. Es en ese instante cuando aprovechan para poner en práctica un "modus operandi" que se va extendiendo por la provincia: "Un hombre se me acercó y me señaló al suelo diciéndome que se me había caído dinero. Había unas monedas. Mientras, su cómplice abrió la puerta del coche y se llevó mi bolso con la cartera y toda la documentación. Me agaché, cuando quise darme cuenta habían volado", explica una afectada. Obviamente, las monedas han sido colocadas previamente por el aparente "buen samaritano" que actúa como gancho. Los aparcamientos de las grandes superficies son el lugar favorito de este tipo de ladrones. Varios robos así han tenido lugar en la capital zamorana y, en las últimas semanas, en la cada vez más concurrida Sanabria, aunque no todos se denuncian. Así que, conviene estar ojo avizor para que la cesta de la compra no salga aún más cara de lo que marca el alza de los precios.