La Opinión de Zamora

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Despliegue militar contra los incendios en La Culebra

Efectivos de la UME realizan ejercicios de lucha contra siniestros forestales en puntos calientes: Tábara y Villardeciervos

Los militares con las mangueras para extinguir el fuego. | Araceli Saavedra

El Quinto Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM V) de la Unidad Militar de Emergencias (UME) concluye mañana, jueves, los ejercicios de lucha contra incendios forestales en el enclave de la Sierra de la Culebra, entre los municipios de Villardecieros y Tábara.

Los efectivos se desplegaron por una amplia zona con un puesto adelantado en Ferreras de Arriba.

El Capitán Adrián Miguel Reino, jefe del subgrupo táctico 53 del BIEM V, precisó que tras el periodo de preparación de dos ciclos y un total de 12 semanas “culminamos esa preparación con un ejercicio que simula las condiciones de un incendio forestal”. Tras la alerta e intervención por el periodo de inundaciones se preparan para la campaña de incendios.

Un momento de los ejercicios en la Sierra de La Culebra. | Araceli Saavedra

Los analistas civiles y de la UME, de acuerdo a los modelos predictivos de inteligencia a medio plazo, para el verano, en la zona noroeste “se prevé que haya anomalías térmicas elevadas, y conjugado con el estrés hídrico, la falta de agua que tienen ciertos combustibles, unido a dorsales en las que se mete aire sahariano”, con la reserva de que son modelos y previsiones.

El tiempo de activación de la UME es desde alerta temprana hasta la orden de intervención. El tiempo de respuesta para el primer elemento de reconocimiento, en base, es de 15 minutos. Otro elemento de primera intervención está listo en una hora y el resto de elementos escalonados se activarían a partir de dos horas y media. Un elemento de intervención consta de 6 medios y 21 militares.

A los mandos del camión. | A. S.

El subgrupo táctico está formado “por unos 100 militares hombres y mujeres y unos 50 medios materiales, repartidos en dos secciones de intervención y contamos con unidades de apoyo operativo como pueden ser ambulancia, Policía Militar, maquinaria pesada y una unidad de apoyo logístico que con esa unidad tenemos autonomía para poder trabajar –el grupo subtáctico- aislado”.

El ejercicio simula la intervención en un incendio forestal en una emergencia de situación operativa 2, que solicita la activación de la UME. Con un equipo de simulación sobre el terreno se generan todas las incidencias y eventos” que requiere el despliegue. A lo largo del ejercicio de entre 48 y 72 horas –máximo de trabajo en una intervención sin relevo- se van desarrollando “diferentes tácticas y técnicas”. El capitán hacía la precisión de que este ejercicio se desarrolla en una zona de protección ZEPA y Reserva de la Biosfera.

Un dron, entre las tecnologías que se utilizan para la extinción de incendios. | Araceli Saavedra

Las incidencias posibles en un incendio obligan a realizar diferentes intervenciones “desde ataque directo, ataque indirecto, defensa interface urbano forestal, empleo de maquinaria pesada”. Con apoyo de un equipo de un asistencia sanitaria y personal formado dentro de las secciones “se simulan atrapamientos en los que se ven involucrados vehículos, intoxicaciones por humos, diferentes lesiones, incluso accidentes de múltiples víctimas” que fuerzan a la unidad a saber responder ante ese tipo de situaciones.

Para el capitán Miguel evaluar qué situaciones son más peligrosas “es complicado de responder. Evidentemente, nosotros lo primero que tenemos que proteger son las personas y los bienes materiales. Sí que en nuestro caso -en caso de que haya peligro por humo, por paveseo, que puede arder alguna edificación- puede ser una situación muy complicada. Para los “intervinientes en función de cómo actuemos también se pueden dar situaciones de riesgo, si al final elegimos mal nuestra táctica y nos metemos en una zona que no deberíamos y podíamos sufrir un atrapamiento”.

Despliegue de vehículos. | Araceli Saavedra

La coordinación con los medios de la Comunidad Autónoma “por un lado tenemos la gente que interviene sobre el terreno y en Centro Provincial de Mando o en el Autonómico destacamos un oficial de enlace que está en coordinación con el delegado Territorial, con el Director del Plan. Y sobre el terreno el primer elemento de reconocimiento que llega se va al puesto de mando avanzado, donde está el director técnico de la extinción”. Cuando se incorpora el jefe de subgrupo táctico –en este caso el capitán Adrián Miguel- se mantiene en contacto y coordinándose con el director técnico.

Dentro de los “motores” que pueden mover el incendio, además de un viento superior a 25 ó 30 kilómetros por hora, que recorría la Sierra de la Culebra, el responsable del Subgrupo táctico 53 topografía sumó la topografía, si la orografía es muy complicada, la carga de combustible, que pueden convertirse en incendios convectivos “se pueden dar multitud de escenarios".

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