La Opinión de Zamora

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Tábara se manifiesta para proteger la agricultura frente a las placas solares

La avalancha de instalaciones en regadío desata las protestas del sector primario, que pide que se legisle para usar solo terreno baldío

Concentración de ayer en Tábara para pedir que las placas solares no se instalen en terreno agrícola productivo. | Zamora Viva

El pueblo de Tábara se ha manifestado para pedir protección para la agricultura frente a la avalancha de explotaciones fotovoltaicas que se han instalado en las tierras de regadío de la zona.

Una de las pancartas que encabeza la convocatoria revela la preocupación que ha llevado a que plataformas vecinales, sindicatos agrarios y empresas del sector, apoyen esta convocatoria: “Qué comemos hoy, ¿placas?”, se adivina sobre el espaldarazo que supone perder hectáreas de regadío.

Desde la organización promotora, la Plataforma en Defensa de la Tierra de Tábara, han informado a los asistentes sobre la situación “problemática”, y reclaman “legislación que proteja las tierras de cultivo”. De esta manera, Tábara se une a la petición que los sindicatos agrarios presentaron ante Ministerio y Consejería la semana pasada para pedir una Ley regularizadora.

Los manifestantes explican que en las tierras de regadío como las de Tábara “hay inversión de dinero público”, y argumentan que deberían utilizarse “para la producción agrícola, no para la instalación de placas”, y resaltan la actualidad alimentaria en España, con una cesta de la compra cada vez más cara y un contexto de déficit.

La comunidad de regantes: “El regadío es el futuro de Tábara”

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La protesta también sirvió como punto de información: la Plataforma en Defensa de la Tierra de Tábara alertó sobre supuestos contratos con letra pequeña a los propietarios. Destacan cláusulas a futuro “en las que los propietarios tendrán que hacerse cargo de las placas en 25 años y de su reciclaje”, avisan desde la plataforma sobre la urgencia de revisar a fondo los escritos antes de firmar.

Desde la comunidad de regantes de Tábara, el presidente Javier Jorge reivindica que el regadío “es un terreno que no está para ese destino”, y recuerda que esta infraestructura agraria supuso una inversión de 35 millones de euros, un 80% aportado por el Estado. El resto, aunque se dedique a otros usos o se expropie, “se tiene que seguir pagando desde la comunidad de regantes durante 50 años”.

Precisamente ha sido la comunidad la que ha presentado alegaciones por el uso de este regadío para placas “aunque el propietario firme que sí quiere fotovoltaicas en su terreno, la comunidad tiene algo que decir”, explica el presidente sobre una postura que quiere priorizar la producción agraria local frente a los proyectos privados de renovables.

“El regadío es el futuro de Tábara”, concluye sobre una opción que se niega “a perder ni un solo centímetro”.

Concentración en Tábara para pedir protección para el regadío frente a las solares. | Zamora Viva

Ignis niega coacciones y defiende su “impacto positivo”

Tras la denuncia de la Plataforma en Defensa de la Tierra de Tábara por presuntas coacciones a propietarios, la empresa Ignus, presente en Pozuelo y Moreruela de Tábara desde 2019, ha desmentido las acusaciones de la plataforma.

Sobre las condiciones de los contratos, la matriz que engloba a promotoras como Collado Solar, Madroño Solar, Enebro solar, Espliego Solar, Caoba Solar, y Malvasía Solar dice que “aparecen claramente reflejadas en el mismo y desde Ignis siempre se atienden todas las dudas”.

En relación a las expropiaciones, Ignus recalca que “los proyectos fotovoltaicos son reconocidos de utilidad pública por la Ley” y que las expropiaciones forzosas son “el último recurso”.

Señalan que “el proyecto ha tenido una gran acogida en la zona” con un porcentaje de superficie firmada para el desarrollo de estos proyectos que alcanza el 85% y con el objetivo de llegar al 100%.

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