Más de 150 representantes de las federaciones autonómicas de la Real Federación Española de Caza (RFEC) se han concentrado a las puertas del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico para exigir el cese de la vicepresidenta tercera y titular de ese departamento, Teresa Ribera, a la que ven "entregada al ecologismo y al animalismo" al "querer prohibir" la caza de la codorniz.

El presidente de la RFEC, Manuel Gallardo, ha entregado un documento en la sede ministerial en la que trasladan sus reivindicaciones a la ministra Ribera a quien aseguran que no cejarán en su esfuerzo hasta lograr su dimisión o cese.

Este viernes está convocado el Comité de Flora y Fauna Silvestre en el que uno de los asuntos a tratar es la declaración de la codorniz como especie en peligro de extinción, lo que en la práctica supondría la prohibición de cazar este ave.

Pero Gallardo ha asegurado que esa prohibición no se va a materializar porque las distintas federaciones autonómicas han hablado con los consejeros del ramo que participarán este viernes en el citado órgano consultivo donde vaticina que votarán "no" a la propuesta planteada por SEO/BirdLife.

"Hoy le hemos dicho a voces que dimita", ha incidido el presidente de la RFEC ante las puertas del Ministerio donde ha exigido a Ribera una reunión donde en la que presentarle sus reivindicaciones y exigirle una transición justa "pero no a cargo de sacrificar territorios y al mundo rural".

Ideología "animalista y totalitaria"

A su juicio, Teresa Ribera está "entregada al ecologismo y al animalismo y es una activista". "Lo que dijo a título personal de que prohibiría la caza, hoy lo dice como ministra y eso no se puede permitir", ha apostillado Gallardo, que acusa también a la ministra de sacrificar a una parte muy importante de la ciudadanía por la ideología animalista y totalitaria.

Por ello, ha anunciado que seguirán exigiendo la dimisión de Ribera y no cejarán en el intento, al tiempo que advierte al Gobierno de que "queda poco tiempo para las elecciones" y los cazadores, que aglutinan en torno a 2 millones de personas en el conjunto de España, no van a apoyar a "ningún partido que no defienda la actividad".

"La caza es apartidista pero no es apolítica. La caza ha llegado a la política y va a forzar a los partidos a que atiendan a nuestras reivindicaciones. Continuaremos en la batalla", ha defendido.

Asimismo, en declaraciones a Europa Press ha manifestado que la caza es un sector humilde que ha estado silenciada durante mucho tiempo pero tras "agresiones continuas" a su actividad y tienen que "luchar".

Reacción de Quiñones

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones, se ha dirigido por carta a la vicepresidenta tercera y titular del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, solicitando la retirada de la propuesta de inclusión de la codorniz común en la categoría de riesgo extremo del Catálogo Español de Especies Amenazadas, medida que impediría su caza.

Esta propuesta figura en el orden del día de la reunión del Comité de Flora y Fauna, convocada para mañana. El consejero reclama que una decisión de esta envergadura “debe ser informada, consultada y tratada con las comunidades autónomas gestoras de la biodiversidad” y advierte de la repercusión económica y social de la caza de la codorniz en Castilla y León, con la mayor población y número de capturas de esta especie. Asimismo, el consejero requiere a la ministra a que con esta propuesta sobre la codorniz no se repitan las formas empleadas con las comunidades autónomas respecto a la inclusión del lobo en el Lespre y lamenta que se trate de un nuevo “ataque directo” a Castilla y León.

Suárez-Quiñones ha solicitado a la ministra Teresa Ribera la retirada de este punto de la agenda, recordándole que hay mejor información disponible sobre la especie que la que fundamenta la convocatoria ministerial y, sobre todo, que la decisión debe surgir del consenso y no de la imposición, como sucedió en el caso del lobo.

Para el consejero, las comunidades autónomas no han sido informadas ni consultadas de esta iniciativa administrativa, a la vez que califica de sorprendentes las prisas y formas de esta actuación, puesto que el Ministerio para la Transición Ecológica, “de forma hermética y opaca”, ha elaborado una memoria técnica justificativa al respecto sin haber realizado ninguna consulta previa ni solicitado información técnica, estudios o criterios a las comunidades autónomas ni al resto de investigadores que trabajan sobre la especie.

A su vez, Suárez-Quiñónes lamenta que es aún más sorprendente es que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que es el departamento ministerial del Gobierno que coordina las políticas en materia de caza a nivel estatal, se haya tenido que enterar de esta cuestión a través de la información proporcionada por las comunidades autónomas, quienes ya han mostrado su malestar por la premura de tratamiento de la catalogación de la especie sin haber sido consultadas con carácter previo.

El lobo

Según Suárez-Quiñones, nuevamente la forma de actuar del Ministerio para la Transición Ecológica es idéntica a la acontecida recientemente con el caso de la inclusión del lobo Ibérico (Canis lupus) en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre), cuando con un planteamiento ya decidido de antemano consigue, ignorando totalmente a las comunidades autónomas, que son legalmente las que gestionan la fauna, limitar la gestión sostenible de los recursos naturales renovables, así como su aprovechamiento cinegético.

Para el consejero, se trata, desde luego, de un nuevo ataque a la España rural y a las formas de vida que en ella se practican. Un ataque más en sentido contrario a la lucha contra la despoblación por parte de una Vicepresidencia del Gobierno que tiene entre sus competencias el reto demográfico.