La Opinión de Zamora

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Manganeses de la Lampreana elimina las barreras arquitectónicas

Una inversión de 36.000 euros ha permitido adaptar la planta baja del edificio consistorial para facilitar el acceso a las personas mayores

ESPAÑA MUNICIPIOS DESPOBLACIÓN

Manganeses de la Lampreana ha adaptado su ayuntamiento para eliminar las barreras arquitectónicas y facilitar el acceso de todos los ciudadanos “en una población en la que, como en todo el mundo rural, cada vez hay más gente mayor que no está para subir escaleras”, explica Juan Carlos Bueno, alcalde del municipio.

La remodelación del consistorio ha supuesto una fuerte inversión por parte del Ayuntamiento de Manganeses de la Lampreana, que ha destinado 36.000 euros a adaptar la planta baja del edificio, a donde se han trasladado los servicios más importantes, que antes se encontraban en la planta superior.

Así, los ciudadanos ahora pueden llegar, sin subir ni un escalón, a la Secretaría, a la agrupación de Juzgados de Paz, al salón de plenos e incluso al despacho de la Alcaldía por si necesitan reunirse con el regidor.

Con las obras ya terminadas, estos servicios administrativos se han podido trasladar al espacio a nivel de calle que antes ocupaba la biblioteca municipal.

Manganeses de la Lampreana elimina las barreras arquitectónicas

La biblioteca fue un servicio muy utilizado por los manganesinos tras la llegada del internet al municipio, ya que podían navegar gratuitamente en los ordenadores públicos. Sin embargo, la llegada de la banda ancha a las casas ha hecho que poco a poco la afluencia de vecinos a la biblioteca vaya decayendo, por eso el Ayuntamiento decidió dedicar este espacio más accesible a los servicios administrativos. La biblioteca seguirá abierta al público en la planta de arriba en el mismo horario que el consistorio.

Inicialmente, el Gobierno municipal barajó otras opciones para mejorar la accesibilidad, pero la estructura del edificio no permitía la instalación de un ascensor, y los usuarios con problemas de movilidad suelen ser reticentes a utilizar ayudas como las de las sillas salvaescaleras.

Finalmente, se optó por el traslado de las oficinas a la planta baja. Para ello se han llevado a cabo unas obras para adaptar el espacio con varios despachos, se ha renovado la carpintería y se han remodelado los baños. Una parte de la inversión fue sufragada con una ayuda de 12.000 euros de los “fondos Covid” de la Junta de Castilla y León y la Diputación de Zamora.

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