Rabanales ha recuperado la celebración de las fiestas en honor a San Blas. Históricamente tenían lugar coincidiendo con cada 2 de febrero pero, a causa del éxodo y la despoblación rural, desde hace varios años se adelantan al fin de semana anterior para así facilitar la presencia y participación de los emigrantes.
San Blas antiguamente era una fiesta comarcal debido a la gran devoción que profesaban a su reliquia, como protectora contra los males de garganta, en los pueblos de la contorna. Es además el patrón del pueblo, aunque la iglesia esta dedicada a San Salvador.
Los mayordomos de San Blas de este año han sido las familias de Salvador Moral Lorenzo y Carmen Ferrero Moral, Lucas Moral Lorenzo y Fermina Rivas Fernández, y Pilar Martín Rivas y José Joaquín Ramos Castilla. Han mantenido vivas las tradiciones, entre ellas las de portar las varas de San Blas, (insignias de mayordomía).
Tras el paréntesis obligado de 2021 a causa de la pandemia del los actos principales fueron la misa oficiada por el párroco Teo Nieto y la procesión con San Blas, portado en su florido carro. Después vino la subasta del ramo y las ofrendas realizadas al santo patrón. Las familias pujaron por el ramo elaborado a base de naranjas y de rosquillas caseras alistanas al que se le atribuyen tras su bendición propiedades milagrosas.
La reliquia tiene ya 415 años pues así lo delatan los manuscritos de las “Memorias del Arzobispado de Santiago de Compostela” de 1607. Reza la existencia de “una reliquia pequeña de San Blas en el altar colateral del lado de la epístola que es de su advocación y está puesta en una cajita de plata” y a la que “acuden en busca de protección gentes hasta de Portugal”.
Por su parte la Bula Pontificia de San Blas de Rabanales data de 1714, por lo cual sus primeras gracias e indulgencias llegaron el día 3 de febrero de 1715. La concedió el sumo pontífice Clemente XI. La indulgencia plenaria la conseguían “todos los cofrades que confesados y comulgados visiten la capilla del santo patrono cada día 2 de febrero”. Aparte incluía hasta cuatro fechas más para ganarse los “Siete años y siete cuarentenas de perdón”, una por cada diferente estación del año. 30 de mayo (San Fernando), 28 de agosto (San Agustín), 28 de octubre (San Simón) y 31 de diciembre (San Silvestre).
La cofradía de San Blas llegó a contar con cofrades, aparte de Rabanales, de pueblos tan dispares como Fradellos, Tolilla, Lober, Samir, Valer, Gallegos del Río, Puercas, Mellanes, Matellanes, Ufones, Tola, Grisuela, Villarino, San Vitero, Bercianos, Campogrande, Alcañices, Alcorcillo, Riofrío, Ceadea, Arcillera y Vivinera que acudían a venerar a San Blas y a dorar su reliquia cada 2 de febrero.
Los cargos siempre eran ocupados por cofrades de Rabanales. El cabildo tenía lugar cada 12 de enero y era donde se aprobaban o denegaban la entrada de cofrades. Para ser cofrade había que abonar un cordero, un alquer de trigo y una vela de cera.
La Bula de Clemente XII estipulaba antaño sobre el 2 de febrero que “ese día se de a besar la reliquia del santo, por la tarde, y en el día siguiente por la mañana, a todo genero de personas, para su consuelo y para que aumente la devoción a San Blas”.
Antaño los cofrades portaban hachas encendidas y tras la misa compartían una comida con cargo a la hacienda de la hermandad
Antaño los cofrades portaban hachas encendidas y tras la misa compartían una comida de olla de vaca y carnero y postre de fruta con cargo a la hacienda de la hermandad. “Pues lo que la cofradía tiene los hemos dado los cofrades de limosna dando comida a todos los pobres que acudían”.
Vecinos y devotos disfrutaron tras los actos religiosos del folclore hispanoluso con la actuación del grupo de Aulas de Música de Aliste y Tras os Montes de Trabazos y sus ancestrales danzas al son de las gaitas de fole, los tamboriles y las dulzainas luciendo la histórica y colorida indumentaria tradicional alistana.
La jornada del sábado estuvo dedicada a la Virgen de las Candelas con misa y procesión con la subasta de las ofrendas. Los festejos concluirán ya el próximo día 3 de febrero (jueves) con la misa de “San Blasico” en honor de los difuntos.
