El brote de gripe aviar recientemente detectado en una granja de pavos de la provincia de Segovia está teniendo efectos perjudiciales para todo el sector avícola de Castilla y León, incluso en la provincia de Zamora, a unos 200 kilómetros del foco.

Además de temer que la desconfianza de los consumidores haga caer las ventas nacionales y las exportaciones de carne aviar, los ganaderos de Castilla y León se han quedado también sin la posibilidad de suscribir el seguro agrario que indemniza las pérdidas en caso de que un foco de esta enfermedad aviar aparezca en sus explotaciones, al menos hasta el mes de marzo.

Una cláusula de la normativa de la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa) prohíbe asegurar las explotaciones avícolas en todo el ámbito geográfico de una comunidad autónoma hasta transcurridos 42 días desde la declaración oficial del último foco de influenza aviar.

En este caso, los 42 días desde la declaración del foco de Segovia se cumplirán el 1 de marzo.

Ayer, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) solicitaba ayer a Enesa que deje sin efecto esta cláusula en el caso de Castilla y León.

Una explotación del norte de la Comunidad de Madrid sí puede contratar el seguro pese a estar mucho más cerca de la explotación segoviana infectada

La organización agraria defiende que esta medida de salvaguarda “puede ser útil en comunidades autónomas uniprovinciales, pero resulta ilógica y poco rigurosa que se aplica en una región como Castilla y León al impedir que explotaciones ganaderas muy alejadas de los focos detectados puedan contratar esta garantía contra la gripe aviar".

Se da el caso de que una explotación del norte de la Comunidad de Madrid sí pueda contratar el seguro pese a estar mucho más cerca de la explotación segoviana infectada que cualquier granja de la provincia de Zamora o de León.

Por ese motivo, UPA se ha dirigido tanto a Enesa como a la Comisión de Seguros de la Junta de Castilla y León, donde proponen cambiar el criterio de la referencia autonómica por otro que tenga en cuenta las distancias objetivas al foco.

Vacunas contra la Salmonella

Por otro lado, la Consejería de Agricultura y Ganadería adoptaba ayer otra medida para proteger al sector avícola de la comunidad de otra enfermedad zoonótica que puede afectar al ganado avícola, en este caso de la enfermedad de la Salmonella.

Ayer se abría el plazo para solicitar las ayudas destinadas a la adquisición de vacunas frente a aquellos serotipos de importancia para la Salud Pública (Salmonella Enteritidis y Salmonella Typhimurium).

Las vacunas van destinadas a las gallinas de recría de futuras gallinas ponedoras, y su aplicación se enmarca en el Programa Nacional de Vigilancia y Control de la Salmonella en gallinas ponedoras de la especie Gallus gallus.

Las ayudas pueden ser solicitadas por las Agrupaciones de Defensa Sanitaria Ganaderas avícolas (ADS) y por los titulares de explotaciones ganaderas no integradas en estas ADS.

El máximo subvencionable que se concederá por vacuna será de 4 céntimos por dosis

El plazo de solicitud de las ayudas para comprar vacunas se abría ayer y finalizará el lunes 14 de febrero. La ayuda cubre todas las vacunas aplicadas a lo largo del año 2021, que dispongan de la autorización de comercialización por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios o por la Comisión Europea.

Del importe máximo de los costes de adquisición de las vacunas deberán deducirse los importes recibidos con arreglo a régimenes de aseguramiento, y el IVA solo será subvencionable cuando no sea susceptible de recuperación o compensación.

La cuantía subvencionable por las ayudas varía en función del solicitante, a las ADS se les subvenciona hasta el 100% del importe justificado, pero a las explotaciones no integradas solamente hasta el 50%. En cualquier caso, el máximo que se concederá por vacuna será de 4 céntimos por dosis para aquellas que vacunan frente a la S. Enteritidis o a la S. Typhimurium, y de 8 céntimos por dosis para las vacunas ambivalentes.