El incremento de los precios de la energía, de la mano de obra y, sobre todo de los cereales, ha elevado en un 21% el coste de producir un litro de leche de oveja respecto a lo que costaba hace un año, pero el dinero que perciben los ganaderos por ese litro de leche no ha subido en la misma proporción. En estos momentos la industria y la producción negocian los contratos para el año 2022, que deben estar cerrados antes del 1 de abril, pero está siendo más difícil que nunca llegar a un acuerdo sobre el precio en origen de la leche, incluso para la mayor agrupación de ganaderos, el Consorcio de Promoción del Ovino, que suma unas 650 explotaciones.
Así se lo trasladaron los directivos de la cooperativa al ministro de Agricultura, Luis Planas, que ayer paró en la sede del Consorcio, en Villalpando dentro de su visita por Castilla y León, que le llevó primero a la fábrica de azúcar de Acor, en Olmedo, y después de Villalpando al canal de riego del Páramo Bajo, en la provincia de León.
Nueva ley de Cadena Alimentaria
El ministro destacó el último cambio normativo en la Ley de Cadena Alimentaria que “supondrá un cambio de cultura en las transacciones comerciales del sector primario” para que los precios en origen superen los costes de producción y aseguren la rentabilidad de las explotaciones. “Sin rentabilidad no se puede hablar de sostenibilidad”, aseveró.
El Gobierno ha sacado a exposición el proyecto de dos decretos que desarrollan la Ley de Cadena Alimentaria
En este sentido, Planas recordó que el Gobierno acaba de sacar a exposición pública el decreto que regulará el registro electrónico de contratos, la modificación de las competencias de la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA), el desarrollo de los trabajos del Observatorio de la Cadena Alimentaria para “afinar” en los cálculos de los costes de producción y la constitución del comité de cooperación entre la AICA y las comunidades autónomas.
Además, se ha expuesto otro proyecto de Real Decreto para modificar la legislación vigente que afecta al sector lácteo, para que deban ser revisados los contratos plurianuales en los que haya un incremento “significativo” de los costes de producción.
A nivel europeo también se está debatiendo el fuerte incremento de los costes de producción que están sufriendo granaderos y agricultores para buscar soluciones a nivel comunitario. La nueva PAC incrementa en un 17% las ayudas asociadas al sector ovino-caprino.
Precios de los cereales
Por último, Planas aventuró un alivio de esta difícil situación a medio plazo, puesto que los cereales y la soja –alimentos para el ganado– han comenzado a bajar de precio en los mercados internacionales.
Pero en este momento, los precios que se están pagando en origen no cubren los gastos de producción de la leche de oveja. Los responsables del Consorcio de Promoción del Ovino, en declaraciones a este diario, incidían en la necesidad de “mejorar la redistribución” a lo largo de la cadena de valor del importe que paga el consumidor por el producto final. El precio en origen debe subir, pero “no decimos que se traslade toda la subida al consumidor”.
Transparencia en la cadena de valor
Para los productores, es necesario que todos los agentes de la cadena “trabajen con transparencia para darle al consumidor confianza de que el precio que él paga se distribuye de una forma justa” entre productores, industriales y distribuidores. Para ello, no solo son necesarias las regulaciones legislativas, que son cada vez más duras, sino también y sobre todo “buena voluntad y transparencia en el trabajo” de todos los miembros de la cadena. “Si conseguimos dar esa confianza, el consumidor incluso está dispuesto a pagar un poco más, se ha demostrado el consumidor lo está demandando”, inciden desde la directiva del Consorcio de Promoción del Ovino.
Los ganaderos exigen una distribución más justa del precio final de los productos.
En el sector del ovino de leche las negociaciones se producen en una situación muy asimétrica, cinco industrias lácteas compran el 80% de la producción, el sector de la distribución también se concentra en un número reducido de empresas, y en cambio el sector productor está atomizado.
El Consorcio de Promoción del Ovino en cifras
Dentro de ese subsector “atomizado” el Consorcio de Promoción del Ovino es el mayor agente productor. Sus socios produjeron 55 millones de litros de leche de oveja en el año 2021. “Somos más de 600 ganaderos con intereses sociales, económicos y responsabilidad cooperativa y sostenible en el medio rural donde vivimos”, destacó Benajamín Fernández Anta, presidente de la cooperativa, al recibir al ministro Planas.
El Consorcio también puso en el mercado más de 125.000 lechazos, 8.000 canales de vacuno y 35.000 toneladas de mezclas para la alimentación animal. Aunque aún no han cerrado las cuentas de 2021, prevén una facturación de 80 millones de euros. La cooperativa cuenta con 38 empleados –la mitad son mujeres– en ocho centros de trabajo repartidos por distintas localidades del medio rural.
Entidad Asociativa Prioritaria Nacional
En diciembre de 2017, tras concluir su proceso de fusión en una sola cooperativa de primer grado, el Consorcio de Promoción del Ovino fue declarado por el Ministerio de Agricultura como “Entidad Asociativa Prioritaria Nacional”, lo cual ha permitido a la empresa invertir más de cinco millones de euros en los últimos cuatro ejercicios al amparo del Ministerio. El objetivo de estas inversiones es lograr la sostenibilidad económica de las ganaderías de ovino e incorporar a jóvenes para conseguir el relevo generacional en un sector que asienta población en el medio rural.
El apoyo del Ministerio que dirige Luis Planas a este tipo de cooperativas prioritarias se incrementará este año con una partida de 50 millones de euros, cantidad que en el ejercicio 2023 será de 45,8 millones de euros.
El Consorcio fue la primera cooperativa de Castilla y León en conseguir el reconocimiento de Entidad Asociativa Prioritaria Nacional. Desde entonces, la ministra Isabel García Tejerina (2014-2018) visitó en dos ocasiones la sede del Consorcio de Promoción del Ovino en Villalpando, y ayer el ministro Luis Planas conocía por primera vez estas instalaciones. Primero se reunió con la directiva de la cooperativa en las oficinas de la compañía y más tarde recorrió la fábrica de quesos del propio Consorcio guiado por su presidente, Benjamín Fernández, y por el gerente, José Antonio Asensio.
El ministro acudió a la visita a Villalpando acompañado de la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, y del subdelegado en Zamora, Ángel Blanco. Hoy Planas visitará las obras del canal de riego Toro-Zamora en Coreses y se reunirá con los regantes de este canal y los del canal de San José.
