El retablo de la iglesia de Venialbo, joya de la corona del patrimonio artístico del pueblo, se muestra en todo su esplendor gracias a la iluminación instalada en el interior del templo parroquial, que realza tanto la pieza principal como las capillas.

La intervención ha corrido a cargo del Ayuntamiento de Venialbo y complementa la obra de restauración de la iglesia de Nuestra Señora de La Asunción, concluida el año pasado gracias a la financiación conjunta del Obispado y la Diputación de Zamora, además de la aportación de la propia parroquia con donaciones de los vecinos. Una inversión de 96.978 euros, repartida entre el Obispado de Zamora (33.000), la Diputación (33.000) y los 30.978 euros restantes aportados por la parroquia, permitió abordar obras de mejora en el templo parroquial que presentaba signos “alarmantes” especialmente por pequeños desprendimientos debido al deterioro de la espadaña. La intervención permitió consolidar la espadaña, renovación de la cubierta y mejora de los contrafuertes.

El retablo y la nave central antes de la instalación de la iluminación. | J. V.

La nueva iluminación resalta la configuración de una pieza artística de gran valor. Prueba de ello es la elección de elementos del retablo de este pueblo de la Tierra del Vino para exposiciones de las Edades del Hombre, la última en Aguilar de Campoo, hasta donde viajó el conjunto del calvario.

Realizado a mediados del siglo XVI, el retablo mayor de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción es la joya del patrimonio religioso local. Como documenta el historiador toresano José Navarro Talegón, el autor de esta obra, Arnao Palla, sería un inmigrante llegado a Toro, probablemente vecino de Aguilar de Campoo.

Las tallas, coetáneas, fueron ejecutadas por el pintor Lorenzo de Ávila. Navarro Talegón apunta que “el diseño del retablo de Venialbo recuerda tanto al del mayor de la iglesia de Santo Tomás Cantuariense, de Toro, que Gómez Moreno no dudó en considerarlo copia del mismo”.

El retablo y la nave central después de la instalación de la iluminación. | J. V. Irene Gómez

Se trata de un tesoro artístico muy querido por los vecinos, que protegieron y guardaron las tallas durante la restauración del retablo, a mediados del siglo pasado, evitando su salida del pueblo. Otra de las “joyas” de la parroquia -un púlpito de finales del siglo XV- se encuentra en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid.

Así como el retablo y la nave central han ganado muchísima vistosidad, la idea es ampliarlo a todo el monumento

La iluminación instalada con fondos municipales incorpora focos del sistema led que garantizan un ahorro energético. La intención del Ayuntamiento es completar el realce de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción con la iluminación de la torre y los alrededores del templo. “Así como el retablo y la nave central han ganado muchísima vistosidad, la idea es ampliarlo a todo el monumento” explica el alcalde de Venialbo, Jesús Vara.

La exaltación del monumento artístico-religioso forma parte del objetivo del equipo de gobierno de “vender” los atractivos de Venialbo a los visitantes y turistas que de forma cada vez más general buscan refugio en entornos rurales.

A través del área de autocaravanas, que año a año consolida este destino entre la Tierra del Vino y la campiña toresana, se ha podido comprobar el interés por los valores naturales y patrimoniales del pueblo. “La iglesia es un punto de referencia y, tanto la restauración como la nueva iluminación resaltan la belleza del templo, especialmente el retablo que llama la atención de todo el mundo” certifica el alcalde.