La ganadería de leche zamorana cierra un año aún más difícil de lo acostumbrado. Los menos de 90 ganaderos que aun resisten en la provincia de Zamora han incurrido en pérdidas propias del “terrorismo rural”, palabras con las que Lorenzo Rivera, responsable regional de COAG, describió las prácticas de la industria durante la manifestación que en noviembre aglutinó a más de 200 profesionales a las puertas de Lactalis, empresa a la que la OPA acusa de tirar los precios de la leche y producir pérdidas a los ganaderos locales de entre 8 y 6 céntimos el litro.

A pesar de una Ley de Cadena Alimentaria aprobada en el último tramo del año para prohibir la venta a pérdidas, los estragos han sido severos para el sector, que ha vendido el litro hasta un máximo de 34 céntimos de euro, mientras que producirlo supone 40 céntimos.

Pérdidas para unos y ganancias para otros es la conclusión a las cifras de Lactalis del año 2020 –recién publicadas ahora– cuando la filial española de la multinacional francesa duplicó sus beneficios alcanzando los 58,4 millones de euros (frente a los 25,5 del ejercicio anterior) y que COAG denuncia se elevan hasta los 80 millones de euros si se le añaden las regularizaciones fiscales.

El grupo Lactalis aglutina marcas como President, Puleva, RAM, Lauki, El Ventero, Flor de Esgueva, Galbani, Gran Capitán o El Castillo, “que se caracterizan por la imposición de precios a los ganaderos locales siguiendo las pautas de la matriz francesa, inferiores a los que se pagarían en Francia”, denuncian desde la OPA.

El año 2021 ha estado marcado además por la escalada galopante de los costes de producción de las granjas, especialmente los energéticos y los de alimentación de los animales al haberse encarecido la luz y los cereales con picos históricos en ambos casos y que además hace frente a los bajos precios de compra de parte de la industria agroalimentaria.

“La política de Lactalis deja bien a la vista como el sector lácteo sufre por la posición dominante de algunas industrias cuyo voraz afán de lucro no parece tener fin. Resulta muy evidente que es más que posible aumentar el precio de la leche y dignificar la renta y la profesión del ganadero manteniendo márgenes razonables de beneficio para la industria”, ha divulgado GOAG sobre las prácticas de la matriz francesa y su filiar y marcas en España.

“Nos permitimos sugerir a Lactalis, si considera que exhibir las ganancias es un mérito entre la parte industrial, que considere también un logro empresarial el dignificar y pagar un precio justo por la leche a los ganaderos”, continúa GOAG al hilo de los beneficios de la empresa que confrontan las pérdidas de los ganaderos locales.

Ante este panorama, COAG ha pedido a los consumidores que “opten por comprar marcas de empresas socialmente comprometidas con los ganaderos locales y que paguen precios justos por la leche a sus ganaderos proveedores a la hora de adquirir no solo leche, sino cualquier producto lácteo”, ha comunicado la OPA a través de un informe.

Un año de protestas y concentraciones por los precios

El pasado 9 de noviembre 200 ganaderos del sector de vacuno de leche se concentraron en Zamora a las puertas de Lactalis en protesta por los precios que se pagan por la leche en origen, que arrojaron junto a paja a las puertas de la industria, además de cortar la carretera. Las manifestaciones continuarán según expresaron en su día las OPAS hasta que las pérdidas, de hasta 60.000 euros anuales por explotación, remitan.