La comisión vecinal de Lanseros ha iniciado el pasado martes la reconversión del minifundio agrario en este término local, cuando se formalizó la solicitud de concentración parcelaria de las fincas ante el Registro de la Junta.

La superficie total del término de Lanseros, perteneciente al municipio de Manzanal de los Infantes, es de 821 hectáreas, de las que el 81% de sus titulares han firmado por escrito su autorización, lo que representa 665,01 hectáreas del total de las propiedades. Precisar que dentro del Ayuntamiento de Manzanal de los Infantes, la cabecera municipal y Sejas de Sanabria son las únicas pedanías donde se ha modernizado la propiedad privada, mientras que en Otero de Centenos, Donadillo y Dornillas aún se está a la espera.

La comisión vecinal estuvo integrada por el concejal de la corporación, Miguel Bovillo Gallego, el concejal y alcalde de barrio, Rafael Ribera Pérez y el representante de la agrupación de propietarios, Antonio Ovelar Pérez. Las propiedades que no han efectuado su consentimiento pueden dirigirse y solicitar la información tanto al Ayuntamiento de Manzanal de los Infantes como al representante vecinal de Lanseros o el promotor local de la concentración.

El concejal Miguel Bovillo afirmaba tras entregar la documentación que esta es “una obra muy deseada porque las fincas que no están en concentración parcelaria se perderán al final para los herederos futuros”. Señaló además que “Antonio Ovelar ha hecho un trabajo de campo impresionante que valoramos mucho”. Ese trabajo es el de recopilación tanto de los cientos de propietarios como de algún millar de fincas muy fragmentadas propias de áreas geográficas de propiedad minifundista.

Miguel Bovillo espera que “finalmente llegue la concentración. Tal y como está la situación que estamos viendo de traslado de la gente de las ciudades a los pueblos, realmente es necesaria”.

En Manzanal de Arriba y Sejas de Sanabria, donde ya está realizada la concentración, se han puesto en marcha plantaciones de árboles frutales o forestales como el castaños “que en parcelas pequeñas no se pueden hacer, son necesarias parcelas de al menos hectárea y media porque de otra forma no se pueden plantar. Es un beneficio para todos los propietarios de este pueblo”. Para el promotor de la concentración, Antonio Ovelar esta medida significa “poner las tierras en valor y darle un servicio a la agrupación de las mismas, que pasan a fincas de remplazo que se pueden habilitar para reforestación, para plantación arbórea de especies productivas o bien para estabulación o granjas”.

Ovelar correspondía y hacía público su agradecimiento a los propietarios que le han trasmitido por carta y teléfono su gratitud “por la atención y la acogida tan puntual que han tenido haciendo tan ágil el resultado del proceso” que ha permitido aportar el 81% de las fincas a la futura concentración, ha señalado.